Especial como el significado del primer vestido de Manuela -con el que su madre se casó-, así fue su boda con su marido, Christian-Alexander Graf von Handernberg. “Es alemán y nos conocimos en Madrid gracias a una amiga en común”. Sacromonte fue el lugar elegido por los novios para dar el ‘sí, quiero’, y la ceremonia se celebró en una finca en el campo de Antequera. La intimidad de la reunión, solo 60 invitados, y el buen gusto de los recién casados permitieron crear una mesa con un gran centro de mesa, en donde disfrutar de esta bonita unión.
Portada Hola Novias primavera verano 2022
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Comienza la aventura
Los novios, a la salida de la Iglesia, después de haberse dado el ‘sí, quiero’. ¡Son la imagen de la felicidad!
Todo al blanco
La novia decidió continuar la línea cromática de su vestido a la hora de escoger los complementos. A juego con su corona de florecitas blancas que decoraban su peinado, Manuela quiso que su ramo también llevase flores del mismo color.
El otro vestido de la novia
Después de la ceremonia, Manuela se cambió el vestido de su madre, que Encarnita, su modista de toda la vida, adaptó, por otro más fluido, diseñado por Susana Poyatos y por ella y confeccionado por su estudio de costura Slabon.
La hermana de la novia
Con vestido fucsia y un tocado de inspiración floral, fue la otra protagonista en la boda de Manuela. Siempre a su lado, apoyándola en todo lo necesario, junto al resto de su familia.
Un gran centro de mesa
Los novios apostaron por la intimidad en su gran día, celebrarlo solo con sus seres más queridos, y así surgió una gran mesa alargada donde había un original centro decorado con naranjas.