Después de un intenso romance con pedida de mano televisada incluida, esta semana Kourtney Kardashian y Travis Barker se daban el 'sí, quiero' en una intimísima boda civil sin apenas invitados celebrada en Los Angeles. Como era de esperar, este no era el único enlace de la pareja, que unos días más tarde decidía celebrar por todo lo alto su unión en una ceremonia en Portofino con numerosas referencias a la estética italiana. Curiosamente, en ambas ocasiones, así como en las fiestas pre y post boda, la novia lucía vestidos prácticamente idénticos, demostrando que tenía muy clara la línea que quería seguir. Minivestidos corsé, guantes y velos de encaje inspirados en la lencería de la década de 1960: está claro que no es una novia al uso.
Una de las firmas italianas por excelencia, Dolce&Gabbana, ha sido la encargada de firmar los estilismos nupciales de Kourtney, así como los de gran parte de las invitadas, incluidas sus hermanas. La característica sensualidad de la marca y su maximalismo -cualidades que, por otro lado, encajan a la perfección con el clan Kardashian- han caracterizado este enlace. El look principal de la novia, con el que llegó al altar, se tratá de un minivestido corsé de pronunciado escote y tirante ancho decorado con detalles de flores bordadas sobre el pecho y en la pequeñísima falda transparente.
Si este vestido era potente de por sí, los accesorios no se han quedado atrás, puesto que lo ha combinado con unos salones blancos de encaje, unos guantes de tul y un imponente velo que ha generado numerosos titulares tanto por su estética como por el mensaje que guardaba.
Confeccionado a base de tul ilusión, escondía un guiño a su ya marido, puesto que, además de numerosas flores, añadía un gran bordado en punto de cruz de la Virgen María, imagen que Travis tiene tatuada en la cabeza. Asimismo, Kourtney ha incluido también las palabras familia, lealtad y respeto que también tiene grabadas en su piel el batería, y que la novia considera un "símbolo de alianza, respeto y devovión común", tal y como ha explicado la firma de moda.
- El extravagante vestuario de las Kardashian en la preboda de su hermana Kourtney en Portofino
Posteriormente, para la fiesta, se cambió y optó por un color muy poco convencional en novias: el negro. Eso sí, el look era muy parecido al que llevó para la boda, igualmente protagonizado por un diseño encorsetado, así como por unos guantes de encaje y velo cortito del mismo tono. Además, remató con unas medias que terminaban de completar la estética sensual y gótica, que, por cierto, le puso Travis.