Despues de una comentada boda civil sorpresa celebrada el pasado septiembre de 2020, Irene Forte y Felix Winckler se han dado el 'sí, quiero' en Sicilia. Esta vez, en una bonita y emocionante ceremonia religiosa. Para la ocasión, la novia cambió el traje blanco más sobrio por un espectacular vestido de princesa al que no le faltaba detalle. Creado por la firma italiana Luisa Beccaria, coincide con muchas de las más codiciadas tendencias de la temporada y, al mismo tiempo, sorprende por sus detalles especiales.
Créditos fotografías: Holly Clark Photography
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Mangas abullonadas y escote ovalado
Dos llamativos detalles del vestido de novia de Irene Forte son las mangas abullonadas (de nuevo muy presentes en la lista de tendencias de las temporadas) y un bonito y romántico escote ovalado, de aires retro pero muy clásico y acorde a la estética total del conjunto. Sin embargo, los bordados tienen mucho protagonismo. Los motivos florales que adornan todo el conjunto son, sin duda, el toque romántico e isleño que conjugan a la perfección con la isla siciliana. Además, tienen una gran carga sentimental para la empresaria.
-La boda siciliana de Irene Forte y Felix Winckler, ex de Carlota Casiraghi
Los bordados florales más importantes
"Gracias a mi increíble madre, Aliais Fortes, que ha confeccionado estos preciosos bordados", escribía la novia haciendo alusión al espectacular trabajo de confección que representa el punto más original de su vestido de novia, las flores. Concretamente, y según ha contado la propia firma, Luisa Beccaria, se trata de un cupé relleno de organdí con estampado floral en rosa y rojo. Bordados de tipo romano que decidieron confeccionar de color blanco y mantener el verde original de las hojas.
Velo y cola, en total armonía
Este romántico diseño pide a gritos una cola de novia tan larga como la que ha elegido Irene Forte. Cola que se solapa visualmente con el velo escogido, estratégicamente situado sobre la cabeza de la forma más delicada.
Peinado y maquillaje
¿La elección? un pulido moño de inspiración medieval que otorgaba gran parte del protagonismo a un sutil efecto humado en la mirada al toque extranatural de unos labios naturales.
Las damas de honor
La madre de la novia también se encargó de que las damas de honor lucieran a juego de la gran protagonista. En este caso, con diseños vaporosos en verde agua, fajín de color negro, mangas farol transparentes y preciosas flores bordadas en diferentes tonos.