La pandemia pausó miles de celebraciones, entre ellas la boda de Lady Kitty Spencer, quien se comprometió en enero de 2020 con Michael Lewis, el magnate del mundo de la moda el multimillonario y 32 años mayor que ella. La eterna ciudad de Roma, en concreto la histórica Villa Aldobrandini del siglo XVI, ha sido el lugar elegido para, finalmente, darse el 'sí quiero'. Para este gran día la novia confió en el talento de su casa textil de cabecera, Dolce & Gabbana, marca a la que presta su imagen como embajadora -además de ser amiga de los modistas Domenico y Stefano- desde hace tiempo. Es cierto que la británica no tiene el título de princesa, a pesar de que su padre Charles Spencer era el vizconde de Althorp y sus hermanos heredarán el nombre, pero la maison italiana de Alta Costura se ha encargado que su traje nupcial sea digno de una.
El espectacular diseño con el que ayer se convirtió en la esposa de Lewis está inspirado en los modelos de la época victoriana, es muy similar al que llevó Grace Kelly en su boda con el príncipe Raniero de Mónaco, y sí, pasará a la historia como uno de los vestidos más lujosos del siglo XXI. El cuerpo entallado de cuello alto y manga larga, acorsetado estilizando el pecho y con una hilera de botones -como el que llevó su madre Victoria Lockwood en 1989 en su boda- dejan a la vista los hombros acentuados y elevados con una extensa falda que culminaba con una cola de varios metros y un larguísimo velo terminado en encaje.
- Así es Michael Lewis, la pareja de Lady Kitty Spencer 32 años mayor que ella
Esta pieza única será la inspiración perfecta para las futuras novias que adoren la Alta Costura y los vestidos elaborados, y sí, ha creado una estampa idílica de Kitty que quedará grabada para la posteridad. El traje nupcial está creado a partir de un delicado encaje blanco hecho a mano en los talleres de Milán, uno de los más demandados para bodas reales y enlaces ultra exclusivos. Pero atención, porque no han sido uno, sino cinco vestidos diferentes dignos de cuento de hadas los que Spencer ha lucido a lo largo de la noche de su enlace en diferentes ocasiones dejando sin palabras a los invitados.
La marca describe así el trabajo realizado para una de sus clientas más queridas: "para este evento único hemos creado una serie de vestidos hechos a mano, cada uno celebrando la belleza de la novia, la pasión por la Alta Costura y la plena felicidad del momento". Kitty y Michael han confirmado con su boda que sí es posible creer en un cuento de hadas y celebrarlo por todo lo alto en un palacio privado, bajo las voces de una ópera y miles de cohetes artificiales que iluminaban el cielo de la capital romana anunciando la nueva unión.