La localidad gaditana de San Martín del Tesorillo ha sido escenario de una de las bodas más elegantes de la recién estrenada temporada nupcial. La finca ‘El Mezquitón’, donde se levanta el club de polo&dressage Dos Lunas, propiedad del empresario Álvaro Sainz de Vicuña Bemberg y su esposa, Anunciada Torras de las Cuevas, acogió, el pasado viernes 2 de julio, el enlace de su hijo, Pascual Sainz de Vicuña Torras. El joven, considerado uno de los mejores jugadores de polo de España, celebró allí su matrimonio con su prometida, la arquitecta de interiores Gabriela Delgado Romero. La ceremonia religiosa tuvo lugar en la iglesia de Nuestra Señora de la Merced, del cercano municipio de Sotogrande. El novio acudió del brazo de su madre. Gabriela llegó en un impresionante Rolls-Royce negro de época. Lo hizo acompañada por su padre, José Tomás Delgado Cabezas.
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La novia lució un sencillo traje diseñado por Jorge Vázquez, de cuello barco, manga francesa y una original cola de pliegues rematados con dos broches adquiridos en París. Los zapatos eran de Jimmy Choo y los pendientes de zafiros, de Van Cleef & Arpels, regalo de pedida de los padres del novio. Gabriela lucía el pelo recogido con un sencillo moño realizado por su peluquero y maquillador, Javier Montenegro. El ramo era un romántico bouquet de peonías y muguet firmado por Aquilea, quien se encargó de la decoración floral junto a Flores Enea, de Jerez de la Frontera. Para la organización de la boda, los novios confiaron en A-Típica Weddings & Lifestyle, la empresa de Claudia Aguirre y las hermanas Paola y Marina Herrera.
Tras finalizar la ceremonia, en la iglesia de la Merced, de Sotogrande, los invitados se trasladaron a Dos Lunas, un club de ‘polo&dressage’ gestionado por los Sainz de Vicuña, en San Martín del Tesorillo, en Cádiz
El grupo Alborada puso la nota musical durante la ceremonia: interpretaron Bailando con lobos, de John Dunbar; La misión, de Ennio Morricone, y una salve rociera, entre otros temas. Un emotivo momento fue cuando sonó la Marcha real durante la consagración. Tras la ceremonia, los invitados se trasladaron al club de polo Dos Lunas. En este espectacular rincón gaditano se ofreció el almuerzo, servido por Catering Miguel Ángel. El menú consistió en una crema de salmorejo con huevo poché, tomates cherry y jamón crujiente; un timbal de cola de toro, y una tarta árabe con dulce de leche. Bodegas Delgado, propiedad de la familia de la novia, se encargó de la selección de vinos. Su manzanilla, uno de sus productos estrella, se sirvió en la boda de los Reyes Felipe y Letizia, en 2004.
La novia es arquitecta de interiores y lució un sencillo traje diseñado por Jorge Vázquez, de cuello barco, manga francesa y una original cola
La música jugó un papel fundamental. Hubo mariachis, actuaron Los Secretos y DJ Nano fue el responsable de poner el punto final a la fiesta con una sesión electrónica. Entre los invitados no podían faltar grandes amigos de la pareja. Alejandra de Rojas fue una de las asistentes más elegantes: llevó un vestido vintage de Elio Berhanyer que había pertenecido a su madre, la condesa de Montarco, quien compró las telas durante un viaje a China y le pidió a su buen amigo que le confeccionara el maravilloso modelo.
Inés Domecq, marquesa de Almenara, también deslumbró gracias a un outfit de la última colección de su firma, The IQ Collection: se trataba de un vestido en cuadros de Vichy y motivos florales en amarillo. Otras de las asistentes más estilosas fueron las hermanas del novio —la restauradora Victoria Sainz de Vicuña, con vestido de Marcela Mansergas y tocado de Mimoki, y Adriana Sainz de Vicuña, de The 2Nd Skin Co—, así como las amigas de la novia. Entre ellas estaban la diseñadora Andrea Mateache o Pía Domecq, esposa de Gonzalo Manrique, hijo del presidente de la constructora Sacyr.
Alejandra de Rojas, que lució un vestido ‘vintage’ de Elio Berhanyer, e Inés Domecq, con un modelo de su marca, fueron dos de las invitadas más elegantes
También se desplazaron hasta Andalucía Isabelle Junot y Álvaro Falcó, marqués de Cubas; Ana Finat, hermana de la empresaria Casilda Finat; la psicóloga Verónica Corsini, esposa del financiero Francis Btesh; Ramón Hermosilla, hijo de la socialité Silvia Gómez-Cuétara, y su novia, la chef mexicana Karla Covarrubias; Guillermo Álvarez-Pickman; la interiorista Mercedes Valdenebro y el financiero Pedro Bravo y la consultora Carlota Pérez-Pla. Todos ellos y el resto de los invitados disfrutaron de una boda de ensueño que iba a tener lugar en 2020 y, debido a la pandemia, se ha celebrado este año. La espera ha merecido la pena.
La novia estuvo acompañada por sus mejores amigas. Entre ellas, la diseñadora Andrea Mateache o Pía Domecq, hija de los marqueses de Domecq d’Usquain y esposa de Gonzalo Manrique, hijo del presidente de la constructora Sacyr