Si hay ganas, el amor puede con todo, y eso lo saben bien Carlota e Iñigo. Ambos son de Pamplona, lugar donde se conocieron en 2009, pero por motivos de trabajo no pasan juntos el tiempo que les gustaría. Sin embargo, eso no ha sido impedimento para celebrar una boda de ensueño. Carlota llevó un vestido de Jorge Vázquez: “Para mí es un grande de la costura en España y todo un referente. Trabajo en el sector de la moda y he seguido su trabajo desde hace muchos años con gran admiración”, nos cuenta Carlota. Después de la ceremonia, los novios celebraron su día en el restaurante Alhambra, en un convite adaptado a la situación actual, pero, como guardan un recuerdo tan bueno, no van a dudar en volver a repetirlo y poder quitarse la espinita de bailar con todos aquellos con los que no pudieron asistir.