Los vestidos de novia sencillos se han convertido en tendencia. Y no es casualidad. Esos diseños minimalistas convencen cada vez a más creativos, que los moldean a su gusto (y al de sus novias) hasta dar con opciones que, además, sean inolvidables. "La tendencia nupcial es dar importancia a los tejidos. Los cortes son más limpios y hay muy poco exceso. Volvemos al less is more. Pero eso no indica que el vestido es más sencillo, sino que es más complejo porque tiene que ser perfecto y debe quedar perfecto de una manera más purista. Si se utilizan puntillas deben ser muy artesanales. Estamos volviendo al trabajo más rico en cuanto a calidad", explica José María García, director creativo de Ze García. La firma, que con frecuencia viste a influencers para eventos especiales –Dulceida lo eligió para los pasados premios Goya, y Marta Lozano para la última edición del Festival de San Sebastián–, acaba de lanzar Galatea, su colección de 2020. Una propuesta en la que los vestidos artesanales y minimalistas se convierten en los absolutos protagonistas. Hablamos con el diseñador sobre sus propuestas, las siluetas que más favorecen y todo lo que debería tener en cuenta una novia para dar con el vestido de sus sueños.
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Inspiras tu nueva colección, Galatea, en uno de los mitos griegos más románticos. Y con ella creas diseños muy femeninos, llenos de sensualidad, que embellecen a la novia. ¿Cómo surgió esta idea?
Siempre me ha llamado mucho la atención el mundo de la mitología griega. Relaciono el blanco de los vestidos de novia con las esculturas griegas, ya que tienen ese punto elegante, romántico, puro, minimalista… El clasicismo es como me imagino a una novia, y cada vez más definimos la identidad de como es una novia Ze García.
Háblanos un poco más de los diseños que podemos encontrar en tu colección Galatea.
Diseños ligeros, con movimientos y caídas de tejido orgánicas para que la tela cobre mucho protagonismo. Líneas sinuosas, en el fondo minimalistas. También volúmenes con tafetán, para que siga con esta sensación de ligereza, ya que es un tejido que permite dar mucho volumen pero con poco peso. Por eso, los diseños son muy cómodos, ya que es vital que la novia se sienta a gusto dentro del vestido y lo haga suyo.
¿Crees que estamos ante una colección apta para todas las novias o solo para las más atrevidas?
Yo creo que apta para todas las novias, siempre claro dentro del estilo Ze García. Intentamos abarcar varias personalidades dentro de una estética definida. Tenemos diseños más clásicos pero también más atrevidos, perfectos para segundos vestidos o fiestas, para eventos civiles, prebodas… Cada novia tiene su historia. Depende de lo que quiera la novia ya que cada una tiene una historia diferente que contar. A veces las novias son las que me inspiran porque su historia me hace imaginar un tipo de vestido.
Recuperas la técnica del drapeado más artesanal, una de tus señas de identidad, para los vestidos de novia. Y los combinas con estructuras muy limpias y arquitectónicas. ¿Por qué te has decantado por esta combinación? ¿Consideras que es especialmente favorecedora?
Sí, el drapeado me gusta siempre que sea de atelier. Me gusta que se note que el trabajo que hay detrás de ese vestido es a mano y bueno. Porque si haces el drapeado robotizado no queda bien. En cambio, cuando la mujer está detrás y lo haces a mano el resultado queda espectacular. En Galatea también lo combino con estructuras más limpias porque yo soy la mezcla de los dos. Al ser del norte supongo que me influye, ya que en el norte la moda es muy arquitectónica y limpia. Como una arquitectura balenciaguesca, artesanía escultural.
Además de una colección, trabajas con diseños a medida. Cuando las novias llegan a tu atelier, ¿suelen pedir vestidos de la colección con algunos cambios para que se ajusten mejor a sus siluetas o también diseños desde cero?
Ofrecemos las dos opciones. Casi siempre que una novia elige algo de la colección no lo suelo modificar. Y cuando partimos de atelier 100% hacemos el vestido a medida por y para ella. Partimos siempre desde el lugar del evento, cuando será, sus gustos hasta la silueta que más le favorezca. Es una experiencia completa para ellas con diseños únicos.
¿Crees que crear un vestido nupcial desde cero es un proceso que puede "asustar" a las novias?
La novia que toma la decisión de atelier es porque le gusta la costura y la moda, y sobre todo quiere disfrutar este proceso. Si viene asustada que no lo haga. Más que asustadas nerviosas diría. ¿Nerviosas pueden estar? Quizá sí, porque la situación te hace estarlo un poco, pero es una experiencia bonita y normal. Las primeras pruebas del vestido son puros nervios.
¿Qué es lo más importante a la hora de imaginar ese vestido soñado?
Sobre todo que se sientan identificadas. Porque ellas no solo se imaginan un vestido sino que se imaginan una boda completa. Y nosotros hacemos un vestido especialmente para ellas para contar esa historia y formar parte de un todo. No es lo mismo casarte en la playa que en un castillo. Lo importante es esa capacidad de poder decir: me imagino el contexto y sé lo que quiero transmitir ese día. Y ahí comenzamos.
¿Cómo definirías a la novia de 2020?
Una novia que busca lo único, lo que no se ha hecho. En cuanto a experiencia, vestido, ceremonia...
En líneas generales, ¿te gusta seguir las tendencias o prefieres acercarte a diseños atemporales?
Totalmente atemporalidad. Me gusta darle un pellizco a la tendencia, pero siempre busco la atemporalidad. Por eso colecciones anuales y una moda lenta.
¿Cuáles son las tendencias que dejaremos de ver en la próxima temporada?
El efecto tattoo… los vestidos de tul carne con bordados encima los dejaremos de ver. También creo que dejaremos de ver los vestidos de princesa con tul y los encajes florales.
¿Hacia dónde va la moda nupcial?
Cada vez más al atelier. La novia tiende a ir a grandes marcas como primera opción, pero creo que al final buscan la experiencia personalizable que puede ofrecer un atelier.
Cada vez hay más chicas que se suman a los vestidos cortos o al pantalón, como creador, ¿crees que llegará un momento en el que estos diseños nupciales superen a los vestidos largos?
No, creo que no. El pantalón o vestido corto suele ser para segundas opciones. No suelo hacer novias que se casen en pantalón. En cambio el vestido corto sí que es una tendencia que gusta mucho, pero nunca va a sustituir el vestido largo de novia. Lo llevan para fiestas preboda, eventos o algo civil.
¿Qué consejo le darías a esas chicas que se casan el año que vienen y tienen que elegir su vestido?
Siempre digo el mismo consejo. Primero adelanta tu boda, busca el sitio y organiza todo en la medida de lo posible, y a partir de ahí haz la búsqueda de tu vestido perfecto. Antes no, porque así ya tienes una hoja de ruta para trabajar.
Y como diseñador, ¿algún truco para elegir el vestido que mejor se adapte a cada silueta?
Sobre todo la novia tiene que tener claro qué es lo que quiere enfatizar y qué es lo que quiere neutralizar. Y a partir de ahí desarrollar el vestido. Si quieres potenciar hombros y neutralizar caderas siempre va a quedar mejor un cuello halter y una falda a capa completa o con un poco de volumen, así como por poner un ejemplo. Es importante que antes de imaginar el vestido sepa que quieren.