Aún recordamos cuando los lazos XL aparecieron como nueva tendencia nupcial de la mano de diseñadores como Carolina Herrera. Poco después, y gracias a la firma Fer Bridal, estos detalles en su versión más extrema saltaron de los vestidos de novia a los peinados más naïf de la temporada. Ahora, sin embargo, podemos de hablar de un caso opuesto. Tomando como referencia las bubble ponytail, unas originales coletas que recrean pequeñas burbujas, observamos que existe una nueva tendencia en los vestidos de novia que se mimetizan con este concepto de belleza tan especial.
El 'efecto burbuja' se extrapola, concretamente, a las mangas de los diseños nupciales. De este modo, la diseñadora Rachel Gilbert, cuya firma homónima es de origen australiano, propone para la nueva temporada románticos vestidos teñidos de rosa, el color favorito de las novias que quieren alejarse del tradicional blanco nupcial. Sus cuerpos se bordan de aplicaciones multicolor y sus delicadas mangas adquieren relevancia gracias a unos volúmenes casi arquitectónicos. La clave para que este concepto no sobrepase ni recargue al propio diseño es seleccionar tejidos livianos y fácilmente moldeables.
Desde nuestras antípodas, pasamos a las propuestas españolas de Böuret, la firma gallega capitaneada por Noela Rivera y Vanessa Datorre. Noneta es su nueva colección nupcial, unas propuestas sin horizontes para mujeres que buscan la verdadera diferencia. Su amplio abanico de posibilidades llega para abrazar a mujeres muy diferentes entre sí, ofreciendo opciones tan dispares com vestidos minimales, discretos dos piezas, prendas de largo midi o este vestido con mangas bubble que se ha convertido en la sensación de la temporada. Al igual que ocurre en el caso anterior tiene unas texturas ligeras y delicadas, protagonizadas por el crepé, el encaje de algodón y el tul bordado de plumeti.
Como decíamos, la inspiración llega de las bubble ponytail, un peinado que se puso de moda hace ya varias temporadas y que conquistó a mujeres tan dispares como la actriz Blake Lively, que fue la pionera luciéndolo en la gala de los MET en el año 2013, la modelo Kendall Jenner o incluso reina Letizia, que consiguió uno de sus looks más espectaculares gracias a este recogido y a un vestido de Nina Ricci. Se trata de una coleta alta, recogida con varias gomas que consiguen ahuecar el pelo de tal forma que toiman esa peculiar forma de burbuja.