¿Qué ocurre cuando una diseñadora se convierte en novia? Rime Arodaky lo cuenta
La creativa francesa ha anunciado que se casará con el fotógrafo Greg Finck y hemos podido conocer los primeros detalles de su futura boda
Las redes sociales se han convertido en la plataforma favorita de los rostros conocidos para dar a conocer sus buenas noticias y difundirlas alrededor del mundo en cuestión de minutos. Modelos como Izabel Goulart o Josephine Skriver anunciaron sus compromisos matrimoniales a través de Instagram e influencers nacionales como María Pombo o Alexandra Pereira hicieron lo propio en su perfil. Pero no solo ellas están llamadas a convertirse en las novias más virales de los próximos meses. Tal y como ha dado a conocer a través de su cuenta de Instagram, la prestigiosa diseñadora nupcial Rime Arodaky cambiará sus propios papeles por un día y se pondrá por primera vez del lado de las novias.
Si ya conocíamos el caso de Lara, la weeding planner que se convirtió en novia, ahora podemos hablar de la diseñadora nupcial que también pasará por el altar. Como ha anunciado en Instagram, su pareja, Greg Finck, uno de los fotógrafos más prestigiosos del mundo según la revista Harper´s Bazaar, le ha pedido matrimonio. A través de stories, la diseñadora ha dado la oportunidad a sus seguidores de formular preguntas donde ha revelado algunos de los detalles de su futura ceremonia.
De este modo, sabemos que el fotógrafo le pidió matrimonio en una romántica azotea del Hotel Refinery de Nueva York, el día antes de presentar su nueva colección. Fue una sorpresa absoluta para ella, de hecho, pensó que estaba bromeando. El anillo de compromiso que le regaló y que la propia diseñadora descubrió en redes sociales, es una creación clásica de la firma Katkim, hecha a medida. Sobre el fotógrafo que retratará su boda, aún no lo tienen claro, aunque barajan tres posibles nombres que, de momento, no quieren desvelar. En cualquier caso, lo que es seguro que les gustaría casarse en una playa o una isla con vistas al mar.
Sin embargo, tendremos que esperar hasta 2020 para verla vestida de novia, por supuesto, con un diseño ideado por ella misma y su equipo, tal y como ha confirmado. El motivo de esperar más de un año para casarse es para que su hijo pequeño, Andrea, sea algo más consciente del momento importante que van a vivir. Cuando imagina el vestido de novia de sus sueños, afirma que tiene que ser "de alta costura, minimal, arquitectónico pero simple". "Soy bajita y no puedo llevar mucho volumen. Prefiero apostar por los bordados y las lentejuelas que por el encaje". Asimismo, reconoce que algunos de sus diseños favoritos para casarse son los bautizados como Duncan o Pearl, y el Vaslav para una boda civil.
Las novias de esta firma francesa, que presenta sus propuestas en la prestigiosa Semana de la Moda Bridal de Nueva York, tienen cierta estética rebelde y huyen de las normas establecidas para crear sus propios estándares de estilo. Sus diseños, tan arquitectónicos como ligeros, son reconocibles a simple vista y beben de muchas fuentes de inspiración, desde la música y el estilo de estrellas como Janis Joplin a la estética de décadas pasadas.