Una idea de plena tendencia en territorio nupcial y de carácter muy español es utilizar un mantón de manila junto al vestido de novia, tal y como hemos visto en las novedosas propuestas de la firma Colour Nude. Gracias a la espectacularidad que siempre desprende este accesorio, no será necesario llevar velo y se centrará todo el protagonismo en la espalda del look. Si esta propuesta es más adecuada para la época de entretiempo, otras firmas como Sole Alonso en colaboración con Anauve Knitwear, Katarina Grey o Sara Lage han decidido adaptarla al invierno, gracias a unos mantones muy especiales elaborados con el punto más calentito.
Cada vez son más las novias que deciden casarse en la época más fría del año, permitiéndose las licencias de incorporar detalles inesperados y sorprendentes en sus looks nupciales. Son muchos los diseñadores que coinciden en afirmar que las novias de invierno guardan tras de sí una magia especial que les permite jugar con muchísimos más elementos a la hora de construir un look. Chaquetas cropped o abrigos de leopardo a los que se les puede dar una segunda vida tras la boda, estolas de pelo en sinuosas capas o los siempre elegantes blazers blancos, son algunas de las soluciones prácticas que nos nos han dejado las novias de este año que está próximo a finalizar. A todas estas ideas, se unen los mantones de punto, capaces de dar un giro de 180º a cualquier look nupcial, aportando al vestido un irresistible aire gypset, perfecto para novias que no quieren perder su esencia en el día más importante de su vida.
Tal y como hemos podido comprobar en los lookbooks y en las redes sociales de tres de las diseñadoras españolas con más renombre en el terreno nupcial, el manual del uso del mantón de punto sigue un patrón claro que consiste en combinarlos exclusivamente con los vestidos más románticos de la temporada. Así, Sole Alonso ve a la perfecta novia de invierno enfundada en un vestido de cuello victoriano, falda plisada y elaborados encajes en escote y mangas, que encuentra en un mantón de punto blanco y con flecos, firmado por Anauve Knitwear, el contrapunto perfecto para restar un punto edulcorado al look y adaptarlo a las novias de temporada, tal y como podemos ver en la primera imagen.
Llama la atención también la propuesta de Katarina Grey, en la que aparece una novia por las calles de París mimetizándose con el ambiente nostálgico de la capital francesa. La diseñadora propone una forma novedosas de llevar el mantón, puesto del revés, sobre la parte delantera y no cubriendo la espalda como es habitual. En su caso, un vestido liso, de líneas rectas y totalmente minimal es suficiente para dar un golpe de efecto al look. Por último, tenemos el ejemplo de Marta, una novia de ensueño ideada por Sara Lage que se casó hace unos días en A Coruña. Para hacer frente a las temperaturas gallegas en esta época del año, nada mejor que un mantón de punto, más grueso que los habituales, para acompañar a un romántico diseño de cuerpo semitransparente bordado de encaje y lleno de detalles románticos.