¡Por fin! Tras meses de especulaciones, apuestas y rumores sobre cómo sería el vestido de novia de Chiara Ferragni -que probablemente se posicionará como uno de los más virales de los últimos tiempos- finalmente hemos podido ver a la influencer italiana vestida de blanco. Después de deslumbrar con un modelo joya de Prada en el primer look escogido para su fin de semana de celebraciones, Chiara ha cambiado radicalmente de estilo y ha ha apostado por un diseño de inspiración romántica para formalizar su relación junto al rapero Fedez en una romántica ceremonia al aire libre celebrada en el Palacio Ducezio del municipio siciliano de Noto.
Tal y como desveló la propia novia mediante una publicación en sus redes sociales -a través de las cuales ha hecho partícipes a sus más de 14 millones de seguidores de la organización del enlace-, la encargada de crear el estilismo más importante de su vida ha sido María Grazia Chiuri, directora creativa de Dior, con la que la bloguera tiene una relación muy estrecha y que ha sido testigo en directo de cómo caminaba hacia el altar del brazo de su padre. El diseño, un vestido blanco desmontable compuesto por cuerpo cuajado de encaje con cuello cisne y manga larga sumado a una voluminosa falda confeccionada con numerosas capas de tul, contaba con una gran abertura a través de la cual se asomaban las piernas de Chiara al andar, un gesto rebelde que aporta un aire de modernidad a un look nupcial de inspiración romántica.
A pesar de ese punto de sensualidad y renovación, lo cierto es que la creación tiene una clara base clásica que ha recordado a varios de los vestidos más icónicos de las royals europeas. A primera vista, se aprecia que el entallado cuerpo de encaje, cuello cisne y manga larga evoca al que escogió Grace Kelly en su boda con Rainiero de Mónaco en 1956, aunque Chiara ha lucido la fina hilera de botones en la espalda en lugar de en la parte frontal como hiciera la Princesa de Mónaco.
Otra de las inspiraciones nupciales de la instagramer y empresaria ha sido, tal y como ella misma desveló hace tiempo, la Duquesa de Cambridge, quien también apostó por los bordados florales en su gran día. Sin embargo, en su boda con el Príncipe Guillermo en 2011, ella se decantó por un corpiño de satén con escote corazón sobre el que lució un delicado cuerpo de encaje francés de manga larga del que partía una voluminosa falda, creado por Sarah Burton para Alexander McQueen.
A pesar de lo diferente que resulta el vestido con el que escogió Meghan Markle para contraer matrimonio con el Príncipe Harry el pasado mayo, también hay ciertas reminiscencias del look nupcial de la cuñada de Kate Middleton en el de Chiara Ferragni. La ahora Duquesa de Sussex abogó por el minimalismo y la sobriedad mediante una creación de Clare Waight Keller para Givenchy -que pronto se convertirá en pieza de exposición- que poco tiene que ver con la elección de la influencer, pero en cuanto al look de belleza, sí que tiene varios puntos en común. Ambos siguen una estética muy natural, y recogen el cabello en moños bajos de estética messy que dejan dos mechones sueltos enmarcando el rostro. Tanto el maquillaje de la Duquesa como el de la empresaria tenían toques muy naturales, con bases poco pigmentadas que permitían apreciar sus pecas -rasgo que comparten-, cejas muy marcadas y labial nude.
Otra coincidencia entre Meghan y Chiara pasa por el velo, que ambas lucieron en su versión más clásica de tul blanco y larga cola. Sin embargo, mientras que la esposa del Príncipe Harry decoró el bajo del suyo con bordados florales cargados de significado, la influencer ha preferido apostar por la sencillez.