Alessandra de Osma ha querido confiar en firmas españolas para su boda con Christian de Hannover. Sin ir más lejos, el diseño nupcial que lució en la ceremonia religiosa era un diseño del gallego Jorge Vázquez, un vestido confeccionado especialmente para ella. Pero al margen del vestido, ha querido complementar todas sus apariciones con joyas firmadas por Suárez.
Una ceremonia que tenía lugar el sábado 16 de marzo en la Basílica menor y convento de San Pedro de Lima (Perú), -aunque la celebración civil fue en noviembre en 2017- y para la que apostó por un diseño muy clásico,confeccionado en gazar de seda doble y chantilli rebordado con hilo de seda, en el que se han empleado 600 horas de trabajo durante 6 meses. Como no podría ser de otra manera, las joyas jugaron un papel muy importante en su estilismo nupcial y entre otras, la vimos lucir una sortija de oro blanco y diamantes que recibió en abril de 2017 en la pedida de mano que tuvo lugar en la casa de la madre de él.
Las joyas de Alessandra de Osma, al detalle
Sin duda lo más llamativo de las joyas es la tiara. Una espectacular pieza que fue realizada para la emperatriz Josefina de Francia y más tarde la lució Victoria Luisa en el año 1913 (princesa de Prusia) en su enlace con el príncipe Ernst-August de Hannover. Pero también Carolina de Mónaco apostó por esta pieza de incalculable valor y lo hizo años más tarde, en 2004 para acudir a la boda de Federico y Mary de Dinamarca. Una tiara que ha ido pasando de generación en generación y es una pieza de mucho valor para la familia. De hecho, y antes de este enlace, ya había aparecido en público recientemente de la mano de Ekaterina Malyasheva, que la eligió para su boda con el hermano del novio, el príncipe heredero Ernst August de Hannover.
Acompañando a este increíble diseño perteneciente a la Casa de Hannover, unos pendientes de la colección Grace de joyería Suárez, elaborados en oro blanco con diamante central talla brillante y pétalos de diamante. Una elección que no es casual, pues la mencionada colección está inspirada en Gracia de Mónaco.
El cóctel posterior a la boda
Tras la celebración, los asistentes al evento, entre los que se encontraban la top de los 90 Kate Moss, Olympia de Grecia, o Alejandra de Hannover, disfrutaron de un cóctel en la casa Berckmeyer y como viene siendo tradición, la novia se cambió de look. Para esta ocasión apostó por un slip dress satinado y una diadema floral que contrastaba con la sencillez del vestido.
De nuevo, confió en Suárez (firma de la que fue embajadora en su momento) con unos pendientes de oro blanco y turmalina verde, talla baguette, de la colección Gerais.
Además, también lució una pulsera de oro blanco y diamantes, talla brillante y que se enmarca en su colección Grace al igual que los pendientes que le vimos llevar en la celebración religiosa.
Una celebración que se ha convertido en uno de los eventos más esperados entre la realeza y comenzó el jueves 15 con una cena informal en la que la vimos lucir un wrap dress floral y unos sencillos pendientes con forma de aro en dorado. El festejo se prolongó hasta el sábado, cuando tuvo lugar una gran fiesta de gala.
De nuevo, su elección fue un vestido de líneas sencillas como también lo fue para el cóctel. Lució la melena recogida en un sencillo moño con raya al medio y adornado con un broche de inspiración Art Decó.
Una pieza con un significado especial, pues fue diseñada por Suarez en 1951. Los pendientes son también de esta misma firma.
Una elección que no hace sino confirmar el idilio de la Princesa con la casa joyera. Se trata de una pieza de oro blanco con perla Australiana y diamantes talla brillante que pertenece a la colección 1943.Esta última celebración, a la que asistieron las españolas Tamara Falcó o Alejandra de Rojas, supone el broche de oro perfecto a dos días intensos en la agenda royal.