La aristocracia europea se ha dado cita este sábado en Marbella, que se ha convertido en el escenario perfecto para una boda real que ha reunido a la Familia Ducal de Luxemburgo. Marie-Gabrielle de Nassau, sobrina del gran duque Enrique y Antonius Willms se daban el 'sí, quiero' en una boda religiosa que se celebró por la mañana en la iglesia del Santo Cristo de la ciudad marbellí. A este enlace además del gran duque y su mujer María Teresa han acudido el resto de su familia: Guillermo y Stéphanie, Félix y Claire, Louis, Alexandra y Sebastián. Entre los 270 invitados a esta gran boda también acudieron los primos de la novia, entre quienes se encuentran las princesas Anunciata y Marie-Astrid de Liechtenstein.
El enlace provocó una gran expectación en la ciudad y la entrada al templo se engaló para la ocasión. Fueron muchos los curiosos que se agolparon a las puertas para ver el desfile de invitados, que lucieron sus mejores galas. El primero en llegar fue el novio a bordo de un Land Rover antiguo. Se mostró muy cercano y simpático con los vecinos y no dudó en hacerse fotos con todo aquel que se lo pedía.
Minutos más tarde hacía su aparición la novia junto a su padrino desvelando así uno de los secretos mejor guardados de la boda, su traje de novia, un diseño clásico de Lorenzo Caprile que tenía flores 5.000 flores en la parte de la cola y 10.000 cristales de Swarovski. Destacó la tiara que lució, una pieza de brillantes con una gran piedra en el centro. Para dar más protagonismo a la obra de joyería optó por no llevar pendientes. La novia entregó el ramo con el que llegó a la iglesia a la Virgen María dentro de la ermita y a la salida portó otro con mucho colorido. Además del diseño de Caprile, Marie Gabrielle estaba previsto que luciera creaciones españolas de Roberto Diz y Pedro del Hierro. Los niños que ejercieron de pajes vestían trajes de Labubé.
El centro marbellí se convirtió en una improvisada pasarela de aristócratas donde destacó María Teresa, gran duquesa de Luxemburgo con un vestido largo en negro, con transparencias y estampado en la parte baja de flores. Sus nueras, Stéphanie de Lannoy, casada con el príncipe herdero Guillermo, llevó un vestido recto con drapeados de color azul añil. Claire de Luxemburgo, mujer del príncipe Félix, también fue de largo con un vaporoso vetido en azul celeste. Todos se mostraron muy sonrientes y felices.
Tras el " sí, quiero" los novios y sus seres queridos se trasladaron a la finca Llanos de Belvis, a medio camino entre Marbella e Istán, propiedad de Sandro Gamazo Hohenhole, sobrino de Ana Gamazo y el empresario Juan Abelló. Sandro es cuñado del novio ya que stá casado con su hermana mayor, Marie Caroline Willms. El enclave es un lugar único rodeado de increíbles paisajes con un ambiente muy bucólico algo que conquistó a la novia: "la naturaleza es el mejor decorado. El típico campo español es nuestra inspiración". En este paraíso entre las montañas malagueñas se celebró el banquete nupcial y la posterior fiesta.
- Los escenarios marbellís de la gran boda real que se celebra este fin de semana
Aunque la pareja se casó civilmente el pasado mayo en el Ayuntamiento de Luxemburgo, han querido celebrar su enlace religioso en Marbella porque "es un lugar con el que tenemos lazos desde hace mucho tiempo. Nuestras familias venían a menudo. Aquí es donde viven mis futuros cuñados, Marie Caroline y Sandro con mis sobrinas. Es un precioso lugar para casarse. Nos sentimos muy afortunados y felices", explicaba recientemente en una entrevista en exclusiva a HOLA.com la novia. Un día antes, este viernes, los novios agasajaron a sus invitados con una cena a modo de preboda en el hotel Marbella Club.
Los novios decidieron casarse en este templo, uno de los más antiguos de Marbella, construido en el siglo XV y posteriormente ampliado en el XVII en la que destaca su fachada en cal y la torre del campanario. "Cuando la vimos los dos supimos enseguida que ese sería el lugar ideal para celebrar nuestra unión. Hay un paseo maravilloso lleno de flores de colores para llegar hasta la ermita, que tiene una preciosa imagen de la Virgen María. Y allí bendeciremos nuestro amor. ¿Quién no se sentiría cautivado por el encanto del casco antiguo de Marbella?", nos contaba Marie-Gabrielle.
La novia se siente muy unida a su familia y por eso toda la Familia Ducal luxemburguesa viajó hasta la Costa del Sol para acompañarla en un día tan importante. "Nos sentimos una familia muy cercana. Con muchos lazos", explicaba a HOLA.com. Los ya marido y mujer residen en Múnich y empezaron a salir hace cinco años cuando se conocieron en Luxemburgo, donde Antonius cursaba su formación en la prestigiosa European School of Luxembourg y en diciembre de 2016 anunciaron su compromiso.