Miranda Kerr muestra su vestido de novia inspirado en el de una princesa, Grace Kelly
"No puedo imaginar un vestido más maravilloso". Miranda Kerr por fin ha mostrado la foto de su vestido de novia de su boda con Evan Spiegel. Un diseño del que nada se sabía hasta ahora y que fue inspirado en el vestido que Grace Kelly lució en su boda con Rainiero de Mónaco en 1956. La que fuera ángel de Victoria's Secret dio el 'sí, quiero' al co-fundador de Snapchat, el pasado 27 mayo de 2017, en una ceremonia en su mansión de Brentwood a la que asistieron solamente 45 invitados.
Para su gran día lució un vestido de princesa con mucho volumen diseñado por María Grazia Chiuri para Dior Haute Couture. "Creo que es el sueño de toda chica que Dior diseñe tu traje de novia”, ha confesado Miranda a la revista Vogue USA, que ha publicado en exclusiva las fotos del gran día. “Honestamente, no podía imaginar un vestido más maravilloso que este”, agregó. "Te cubre completamente y crea una sensación de pureza y misterio", contó la modelo sobre su vestido de saten de manga larga, con lirios bordados, una larga cola y un velo con diadema a modo de corona. "Ella quería algo así como un cuento de hadas, así que me dio la idea para crear algo emocional y sencillo al mismo tiempo”, puntualiza la diseñadora.
"Me he divertido mucho con la moda a lo largo de los años. Solía ser más salvaje, más libre, más bohemia. Pero en este punto de mi vida, mi estilo se ha retraído. Mis mayores fuentes de inspiración siempre han sido Grace Kelly, Audrey Hepburn y mi abuela, que a los 80 años sigue teniendo una elegancia innata”.
Una boda íntima
La suya fue una boda por sorpresa a la que acudieron menos de medio centernar de asistentes. Entre los invitados se encontraban los padres de la novia, John y Therese, su hermano Matthew y su esposo James Wright, sus abuelos, quienes fueron trasladados desde su casa de Nueva Gales del Sur, Australia, además de otros asistentes de “alto perfil y algunos modelos”, según informa el diario Mirror. El exmarido de la modelo, Orlando Bloom, de quien se divorció en 2013, no asistió al enlace, pero sí su hijo de seis años, Flynn, que desempeñó un papel importante en la ceremonia.
El enlace, que duró apenas 20 minutos, se celebró bajo una gran carpa que fue colocada en el jardín de la pareja y que estaba decorada con bancos blancos y numerosas flores de color rosa. Durante la ceremonia, un pianista y un cuarteto de cuerda interpretaron el tema de Disney ‘When You Wish Upon a Star’.