Ernst August de Hannover y Ekaterina Malysheva ya son marido y mujer
Ernst August de Hannover y Ekaterina Malysheva ya son marido y mujer. El primogénito del príncipe Ernesto de Hannover y su pareja, diseñadora de profesión, se han casado por lo civil este jueves en el Ayuntamiento Nuevo de Hannover en una ceremonia oficiada por el alcalde Stefan Schostok, sellando así su amor y su relación, que comenzó hace más de cinco años. La ceremonia religiosa, la gran boda real del año, se celebrará el próximo sábado.
Ha sido un acontecimiento privado y bastante íntimo: según la publicación alemana Hannoversche Allgemeine Zeitung, aproximadamente 30 invitados les han acompañado, incluyendo a los hermanos de Ernst, Alejandra y Christian de Hannover. Este último, de acuerdo con la citada publicación, ha ejercido como testigo junto con una amiga de la novia, Dina Amer y a Julio Santo Domingo, hermano de Tatiana Santo Domingo, esposa de Andrea Casiraghi, que también estuvieron con los novios en un día tan especial. También se han acercado hasta el Ayuntamiento Nuevo numerosos curiosos, esperando a las puertas del edificio con la esperanza de poder saludar y dar la enhorabuena a los recién casados.
El padre del novio, el príncipe Ernesto de Hannover, no ha sido visto en la ceremonia civil. Pocos días antes del enlace de Ernst August, de 33 años, y Ekaterina, de 31, Ernesto manifestó su opinión sobre esta unión, oponiéndose públicamente a la boda en declaraciones para el diario alemán Handelsblatt. Reveló, además, que emprenderá acciones legales para recuperar las propiedades que cedió a su hijo en 2005: “No ha sido fácil tomar esta decisión porque también involucra a mi hijo. Pero me he visto obligado a hacerlo porque está en juego la preservación de los intereses de la casa de Hannover, incluidos valiosos bienes culturales que son propiedad de la Casa desde hace siglos”.
Para este primer "sí, quiero" la novia se ha decantado por un vestido de corte sencillo firmado por Sandra Mansour -la misma diseñadora de sus otros dos vestidos nupciales-, de manga larga y con cuello camisero, brillante y de color rosa pálido. Se ha dejado la melena suelta y ondulada y ha optado por maquillaje discreto y favorecedor. En cuanto al novio, llevaba un esmoquin oscuro con camisa blanca y corbata morada.
Al pronunciar el "sí, quiero" Ekaterina, que aunque nació en Rusia se crió en Praga, se convierte en duquesa de Brunswick-Lüneburg. Y eso solo para empezar, pues desde ahora será también princesa heredera de Hannover y llamada, por tanto, a llevar el título que a día de hoy ostenta Carolina de Mónaco.
Dentro de dos días la pareja pronunciará el "sí, quiero" religioso en una ceremonia que, de acuerdo con la publicación francesa Paris Match, tendrá lugar en la iglesia del Mercado de los Santos George. Un gran acontecimiento que está levantando muchísima expectación y en el que la lista de invitados podría incluir varios nombres de la realeza, pues el novio, ahijado de bautizo del rey Felipe y hermano mayor de Alejandra de Hannover, tiene muchos lazos con varias casas reales europeas además de con los hermanos Casiraghi. La boda se celebrará en el imponente castillo familiar de Marienburg.