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Se van a casar en apenas unas horas. Leo Messi y Antonella Roccuzzo van a poner un broche de oro a su larga historia de amor con una boda que se celebrará en Rosario, Argentina, la ciudad que les vio crecer y en la que se enamoraron. Hace años que se ve a Antonella junto al astro del fútbol, siempre junto a él en un discreto plano, pero quizá muchos no saben aún que su amor nació hace casi dos décadas. Se conocieron cuando eran niños, ya que ella es prima de un buen amigo de Leo, Lucas Scaglia (actual mediocampista en Jacksonville Armada FC de Florida, Estados Unidos), que compartió con el crack argentino su pasión por el deporte -jugaron juntos en la cantera de Newell’s Old Boys-.
Antonella nació el 26 de febrero de 1988 y es la segunda de dos hermanas, Carla y Paula. Es hija de José y Patricia, dueños de la cadena de supermercados Único de Rosario, y practicó gimnasia deportiva en el Club Gimnasia y Esgrima hasta la adolescencia, cuando todos la llamaban, cariñosamente, “Negra”, como señala ¡HOLA! Argentina. Estudió Odontología en la Universidad Nacional de Rosario, después Comunicación Social y más tarde Nutrición -actualmente es empresaria: junto a su gran amiga Sofía Balbi, la mujer del futbolista uruguayo Luis Suárez, con la que abrió una tienda de la zapatería Ricky Sarkany en Barcelona-.Tal y como cuenta el diario La Nación, a él le gustaba desde que se conocieron, aunque solo fueron amigos en ese tiempo.
El destino llevó a Leo a Barcelona con 13 años y allí comenzaría su meteórica carrera hacia la fama con la camiseta azulgrana. La separación era inevitable así que cada uno hizo su vida, distanciados por un océano, y el contacto se fue diluyendo. No sería hasta varios años después cuando se produciría el reencuentro. Fue una noticia trágica la que les volvió a unir, una casualidad agridulce que les acercó de nuevo. En 2005, una amiga de Antonella falleció en un accidente y coincidió que Messi estaba de visita en Argentina. “Antonella tenía 17 años y lo pasó muy mal, estuvo varios días sin ir al colegio. Justo coincidió con uno de los viajes de Leo hacía su casa y, apenas se enteró, corrió para estar a su lado” contó otra de sus amigas en la revista Para ti, en 2010.
Entonces Antonella salía con otro chico, con quien rompió poco después, según cuenta La nación. La amistad con Leo se fue fortaleciendo y nació el amor. En sus inicios llevaron la relación a distancia, dado que él estaba en Barcelona y ella seguía en Argentina. En 2007, ella reveló el noviazgo a sus más íntimos. “Nos encontramos en Roldán para festejar el Día del Amigo, como siempre lo hacemos, y ella sacó la blackberry que Leo le había regalado. No dijo mucho más pero todas entendimos que habían vuelto a salir” contó una de sus amigas en la revista Para ti. Él habló de ella por primera vez dos años después, en 2009, en el programa de televisión Hat Trick Barça, en TV Catalunya. “Sí, tengo novia. Está en Argentina. La verdad es que estoy muy bien y muy tranquilo” dijo entonces sin mencionar su nombre.
La distancia que les separaba se acabó poco después del Mundial de Sudáfrica, en 2010, cuando Antonella se fue con él a Barcelona. “La conozco desde que tengo 5 años, es la prima de mi mejor amigo, rosarina como yo. La vi crecer y ella me vio crecer a mí. Nuestras familias se conocen, así que no tenía dudas”, dijo Messi al diario Clarín, refiriéndose a la mujer de su vida. Y la familia aumentó: el 2 de noviembre de 2012 llegó Thiago, su primer hijo, y tres años más tarde, el 11 de septiembre de 2015, nació Mateo, el menor de la familia, que serán seguro testigos del gran día para sus padres. Una ocasión increíblemente feliz que es un punto y seguido a este amor de película.
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