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De todas las tendencias de boda que han ido saliendo a la luz para el próximo año, la que parece que más ha calado ha sido la de las novias que llevan más de un vestido. Así lo han decidido los lectores de hola.com, que con un total de 153 votos han colocado esta wedding trend a la cabeza de nuestra votación con las doce tendencias más vistas en el universo de las bodas, previstas para 2016.
Dos de las celebrity brides más sonadas que se han casado en España este año lo hacían precisamente así: Alba Carrillo se cambiaba hasta tres veces de vestido durante el día de su boda junto a Feliciano López, con tres diseños diferentes de Rosa Clará. Eva González hacía lo mismo al darle el 'sí quiero' a Cayetano Rivera, con dos vestidos de Pronovias. No son las únicas: una de las novias famosas más recientes, Sofia Vergara, escogía tres vestidos de novia distintos, uno de ellos con cola desmontable, firmados por Zuhair Murad. La popularidad de esta tendencia tiene varios motivos, aunque el más común es la de buscar la comodidad de la novia, ya que la hechura del vestido blanco tradicional es muy diferente de la de cualquier otra prenda. Es un vestido único. Y aunque los talleres y tiendas hacen un trabajo excelente a la hora de adaptarlo para que se ajuste como un guante a las proporciones de la novia, cuando llega el momento de celebrar hay situaciones en las que sencillamente nos sobran metros de tela, varillas o el mismo velo. De ahí que vada vez hayamos visto más colecciones que incluyen vestidos que se transforman, como las colas desmontables que hacen que un vestido princesa se convierta en uno con falda recta, los sobrevestidos que se desabotonan con facilidad para no dañar el peinado, o las faldas que pasan de largas a cortas con sólo quitar la capa superior.
NOVIAS CON DOS 'LOOKS'. Vestido principal de la colección 2015 de YolanCris. Doble look con top de crepe de Alexander McQueen; pantalones blancos de lana de pata amplia de Victoria Beckham; sandalia peep toe con tiras cruzadas de Lodi; horquilla con hojitas de cristales de Jennifer Behr; y ramo de flores con rosas en color vainilla y blush, visto en un desfile de Pronovias.
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El 'vestido 2x1' no es la única opción de las novias que quieren estar ultra cómodas: también es posible cambiar directamente el traje de novia clásico por uno más sencillo. Normalmente en estos casos el cambio suele llegar más tarde, bien entrada la noche, o al menos después de iniciarse el baile. Son las novias que apuestan por el corto, dejando las piernas al aire. Para las que quieran incluir un tercer cambio sorpresa: el último vestido de la noche suele coincidir con la despedida de los novios, cuando abandonan la boda, y también son populares los trajes cortos o los diseños con pantalones de color blanco.
La segunda tendencia preferida por los lectores de hola.com han sido los detalles de boda personalizados. Es decir, todo aquel pequeño rincón de a boda que conseguimos hacer nuestro y sólo nuestro. Esta tendencia está en pleno boom y la encontramos en el hashtag creado a propósito para que los invitados compartan fotos en redes sociales, y en los mensajes especiales relacionados con la pareja. Un ejemplo: volviendo a la boda de Sofia Verara hace sólo unos días, la actriz se desmarcaba con unas servilletas de papel impressas, que hacían referencia a una pequeña broma íntima entre ella y Joe Manganiello, su ahora marido, y el momento en el que se conocieron, él acerdándose a saludarla a ella con un simple 'hola' en español (ella es colombiana, él de Pittsburgh, en Estados Unidos).
Otras tendencias populares de nuestra votción habrían sido las novias con vestidos de dos piezas, como falda + camisa o incluso la rebeca de novia, y las bodas que se celebran en casa.
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