Inspirarse en el Lejano Oeste
Aunque su carrera musical fue evolucionando hacia el pop, en sus inicios Taylor Swift cantaba country, género con el que había entrado en contacto en Pensilvania. No hacía falta escucharle para hacerse una idea de qué cantaba, pues sus looks mostraban su identidad musical a la perfección. Vestidos holgados, flecos... y una colección de botas camperas envidiable que podría reciclar perfectamente a día de hoy para seguir las tendencias.
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Querer ser la más bohemia
A medida que fue haciéndose más conocida, también se dejaba ver entre el público en los festivales de música. Entonces su estética cambió y comenzó a incorporar elementos hippies propios de la década de 1970. Vestidos de telas livianas y a menudo de encajes o bordados, cintas del pelo, estampados florales y psicodélicos, chaquetas vaqueras y faldas de gamuza, entre otros elementos, formaban parte de sus aliados de moda imprescindibles.
Imitar a Serena Van Der Woodsen
Todas tuvimos una era en la que queríamos ser alguna de las protagonistas de Gossip Girl. Y Taylor Swift, al menos, parecía que también. Ella fue capaz de adoptar durante una época una estética clásica, pulida y elegante, a menudo asociada con la moda de estilo universitario del Upper East Side. Era frecuente verle con abrigos de colores como el rojo o el amarillo, zapatos de tacón, cinturones resaltando su cintura, pañuelos ornamentando sus looks, o con bolsos de asa corta colgando del antebrazo.
Añadir un aire punk
Aunque de manera esporádica y discreta, la cantante se declaró, en numerosas ocasiones, amante de la estética punk. Lo hizo de manera sutil, incorporando tan solo algunos elementos que nos evocan a esa corriente de estilo. Su apuesta favorita - tanto dentro, como fuera del escenario - era la de lucir los cuadros escoceses, pero también le pudimos ver en otros momentos derrochando estilo con maquillaje audaz y alineador pronunciado, o zapatos y complementos con hebillas.
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Vestir como antaño
Todas alguna vez hemos lucido un atuendo de estilo old school, es decir, un conjunto que consideremos pasado de moda, antiguo o demasiado clásico. Y, Taylor Swift, como humana que es, también. De hecho, en su lookbook podemos encontrar varias fotografías que así nos lo demuestran, donde lleva vestidos (que aunque ella le quedan muy bien) podrían pertenecer al armario de nuestras abuelas. Muchos de ellos suman la misma estructura: corpiño ceñido, falda en vuelo y largo hasta la rodilla. Todos, por supuesto, acompañados de una "rebequita".
Defender una camiseta infantil
Cuando las camisetas con estampados o motivos llamativos volvieron a ser tendencia hace un año nos dimos cuenta de que, en realidad, tan solo estábamos repitiendo patrones de estilo que ya habíamos lucido en los 2000, y que además habíamos copiado a muchas celebrities que admiramos, como a Taylor Swift. Si alguien sabe llevar shorts bien esa persona es ella, pero nadie se libra de haber lucido alguna vez unos pantalones cortos o alguna falda con una camiseta con dibujos animados o infantiles. Pues ella tampoco.
Lucir looks para ir a un concierto indie
De las camisas de cuadros, pasando por los pantalones pitillo y las botas Chelsea, hasta llegar a las chaquetas bomber. Si tuviéramos que clasificar su estética, tan solo bajo un estilo, probablemente la palabra 'indie' sería la más adecuada. Aunque es gran seguidora de las tendencias, en su esencia le vemos siempre lucir elementos característicos indies. Y nos encanta, pues todavía a día de hoy continúa actualizándolos con su sello personal propio, difícil de encajar solo en una categoría.
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Ser 'Motomami'
En algunos momentos, Taylor Swift también ha experimentado con looks que podrían asociarse con la estética del rock. En algunos de sus looks más atrevidos, más allá de declararse fan de las cazadoras Motomami, ha llevado también calzado robusto, como botas y botines, pantalones de cuero, y complementos de cadenas o layering de joyas que se inspiran en los años 80 y la influencia de esta música en la moda.
Vestir como si fueras a clase
La estética college, que estuvo muy en alza hace un año, a menudo se asocia con un estilo de moda inspirado en los uniformes de colegio. Y, tal y como observamos al analizar sus looks, Taylor Swift es devota de esta tendencia. Es muy común verle incluso a día de hoy, lucir calcetines de colores con mocasines, faldas plisadas, camisas, gorras o polos XL. A veces, incluso, forma looks de inspiración escolar de pies a cabeza.
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