Si hay algo que los profesionales de la moda comparten es que saber elegir bien los complementos no es una cuestión baladí. No hay coche perfecto sin un neumático ganador; ni estilo propio sin una buena pieza de relojería. Y es que los relojes ocupan el podio del estilo y la vanguardia. Hace tiempo que dejaron de ser una pieza funcional para convertirse en auténticas obras de ingeniería y piezas de culto. Cada vez más firmas trabajan sin descanso para crear diseños increíbles y salirse de lo convencional, sin renunciar a una altísima calidad. Y he aquí donde nos encontramos cómo el sector del lujo sigue buscando impactar a sus clientes más exigentes. Lo comprobamos tras las novísimas creaciones de Roger Dubuis, unos diseños que reflejan cómo ha avanzado la industria más exclusiva del mundo hacia un lujo en el que las normas de siempre han cambiado. Y a su vez, transmiten una filosofía centrada en conseguir hitos de la ingeniería mecánica.
La firma suiza, que representa como ninguna otra la Alta Relojería, se reafirma en este sentido: la personalidad va por delante y es la actitud lo único a tener en cuenta a la hora de encontrar el diseño de nuestros sueños. Atrás quedaron los relojes para hombre o mujer. Estas piezas están creadas para mentes audaces, excéntricas y, sí, también para unos pocos privilegiados. Y es que sus precios -algunos de ellos superan el valor de un Ferrari (entre 200.000 y más de 600.000 euros)- les convierten en auténticas piezas de coleccionista o el regalo más sofisticado del mundo.
Un 'corazón' arquitectónico y a la vanguardia
A nivel diseño, la estructura esqueletizada dentro de la caja que deja a la vista el funcionamiento de los engranajes, es una auténtica maestría. Aunque son los acabados entrecruzados con forma de estrella, tanto en los modelos más icónicos -Excalibur Double Flying Turbillion- como en los de inspiración deportiva -Excalibur Spider Pirelli- los que unen las diferentes personalidades de ambas colecciones. Y es que la estética arquitéctónica y vanguardista sin duda define la espectacularidad de todas ellas. Fue en 1995 cuando la firma comenzó su andadura con un solo objetivo: desafiar las normas a través de sus diseños. De ahí que, en este 2021, la exuberante personalidad de estas piezas no solo destacaque por su originalidad, también por reinventar las tradiciones. Por ejemplo, en la línea Excalibur Spider Pirelli, las correas internas de sus modelos tienen el legendario perfil de un neumático intermedio Cinturato™ de Pirelli.
Además, el hecho de que sus ediciones sean extremadamente limitadas confiere a los relojes un valor aun más significativo. En este caso, tan solo 88 unidades del modelo Excalibur Spider en blanco o negro están disponibles; 28 unidades en el caso del modelo Excalibur Spider Pirelli. Pura adrenalina para quienes conciben el lujo desde la exclusividad extrema.