La primavera de este año irrumpió con un aire fresco y lleno de promesas de buen tiempo y mucho sol, trayendo consigo una ola de tendencias que hemos visto en temporadas anteriores y que vienen pisando fuerte. Desde la elegancia atemporal de los estampados gingham hasta la sensualidad de las faldas transparentes, la nueva estación ofrece un festín para los amantes del estilo atrevido y distinguido. El resurgimiento del polo deportivo. añade también un toque de nostalgia a la alta costura, mientras que los pantalones blancos se reinventan, al igual que el denim o los flecos.
Si quieres conocer más detalles acerca de estas tendencias, te vamos a dar todos los detalles en esta galería para que arranques la primavera con unos auténticos looks de experta.
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Todas las tendencias avecinaban: el polo regresa
El polo deportivo, aunque con raíces en los años 20 gracias a Rene Lacoste, alcanzó su apogeo en los años 90, asociado al ascenso de Ralph Lauren como ícono del estilo preppy y símbolo de estatus entre las élites estadounidenses. Este resurgimiento del polo se refleja en la actualidad, con su regreso a la alta moda de la mano de marcas como Carolina Herrera, Loewe y Miu Miu, siguiendo la tendencia de revival de los años 90. Su reinserción en la pasarela sugiere que podría convertirse en un elemento viral, al igual que otros íconos de esa época ya lo han sido este Otoño/Invierno, como las bailarinas o las botas estilo biker.
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Pasión por los 90's
Para la primavera de 2024, el tank top vuelve a tomar protagonismo, evocando el minimalismo de los años 90. Impulsado por la nostalgia de la Generación Z, esta prenda se ha convertido en un elemento clave en las tendencias actuales. Desde prescriptoras de estilo como Camille Charriere hasta grandes firmas de moda, el tank top de espalda nadadora ha sido una elección recurrente. Este look sencillo y minimalista se convierte en la inspiración perfecta para la temporada.
El estampado (y color) más primaverales
El estampado gingham ha perdurado en la moda como un símbolo de elegancia femenina, usado por figuras como la princesa Diana y Audrey Hepburn. Este año regresa con fuerza en blusas y faldas, mostrando un estilo sofisticado y formal, especialmente en atuendos de marcas como Burberry. Esta tendencia combina dinamismo y formalidad en conjuntos de blazers y pantalones rectos, aportando un toque clásico a la temporada. Si tienes duda con el color, no te lo pienses: el azul bebé es, sin duda, el tono perfecto.
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Un boho chic bastante discreto
La primavera 2024 trae de vuelta el estilo boho con fuerza, rescatando prendas de tejidos ligeros y fluidos como blusas románticas y vestidos vaporosos. Marcas como Chloé o Loewe lo confirman en sus colecciones. Este estilo, una reinvención del movimiento hippie, se popularizó en los 2000 y evolucionó hacia una versión más refinada. Ahora, es una de las tendencias más populares, combinando elementos vintage con toques contemporáneos. Es hora de dar vida a look hippies con un aire fresco y vibrante, pero con el matiz más importante de la temporada: no perder ese aire romántico.
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Si no es metalizado, no lo quiero
El uso de prendas metalizadas en la moda contemporánea ha evolucionado desde su origen en los años 70, perdiendo su connotación rebelde y ganando versatilidad en combinaciones estrafalarias. Para incorporarlas, equilibra el brillo con texturas mate y elige preferentemente tonos plateados sobre dorados (o fríos sobre cálidos), mientras que los neutros con acabados metálicos ofrecen directamente opciones más sutiles. Los accesorios y el calzado son excelentes formas de experimentar con esta tendencia de manera discreta. Aunque si quieres ser la invitada estrella de los eventos de tarde, no lo pienses dos veces.
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Una falda inesperada
Las faldas transparentes han pasado de ser exclusivas para eventos especiales a ser una tendencia cotidiana. Confeccionadas en encaje, gasa o seda, se observan tanto en atuendos ejecutivos como en street style. Estos diseños, inspirados en las pasarelas de marcas como Prada y Carolina Herrera, son ahora más sutiles y versátiles. Desde diseños de malla que muestran la lencería hasta modelos midi, estas faldas son candidatas a ser unas de las más vistas de la temporada.
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El pantalón blanco
El pantalón blanco ofrece un look elegante sin requerir largas horas de planificación. Su capacidad para combinar con una amplia gama de colores y prendas lo convierte en un elemento extremadamente versátil. Puede transformarse en el punto focal de un atuendo casual junto con una camiseta y zapatillas, o elevarse a un nivel más formal al combinarlo con una blusa elegante y botas de tacón. Contrario a la creencia popular de que el blanco añade volumen, un pantalón bien diseñado y ajustado puede, de hecho, estilizar la figura, especialmente cuando se complementa con otras prendas que alargan la silueta.
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Vuelta de un imprescindible
El denim total está de vuelta en todas sus formas, desde faldas hasta chaquetas, con marcas que se suman a esta tendencia. Este tejido de sarga de algodón, originario de Nimes, Francia en el siglo XVII, era conocido por su resistencia. Con su versatilidad y fácil combinación, el denim se convierte en un imprescindible en el armario, pero este año en concreto, atenta al tejido desgastado, el tiro alto y las faldas largas.
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