Ahora que las grabaciones de La Voz Kids han llegado a su fin, Eva González ha sustituido las lentejuelas y los volantes que han compuesto sus últimos looks televisivos por un registro más sencillo pero favorecedor en sus propios términos de cara a las ansiadas citas propias del verano, como las bodas y los festivales de musica. Así lo ha demostrado este jueves en el concierto de su querido amigo Pablo López, donde ha estrenado un vestido largo de aberturas que realza el bronceado de verano.
Vestido 'chocolate' con brazaletes dorados: el look de las presentadoras
Recientemente, la sevillana ha caído rendida a los monos de invitada, la alternativa ideal para las mujeres que no quieren llevar vestido, e incluso coincidió con doña Letizia gracias a una pieza con mangas de volantes, de The IQ Collection. La ola de calor que nos ha azotado en julio, sin embargo, parece haberla convencido de volver a los vestidos fluidos con este ejemplar liso de cuello redondo y bajo asimétrico que resalta por su drapeado a la altura del abdomen, un detalle práctico provocado por una inesperada abertura lateral que cumple con disimular cualquier imperfección en la zona.
- Eva González ficha los 'best sellers' de Zara: de la blazer blanca a la camisa rosa
Eva ha conjuntado la pieza con un par de pendientes asimétricos, tendencia que también le habíamos visto hace un par de semanas a la Reina, brazaletes dorados envolventes y unas sandalias de tiras finas atadas al tobillo. El estilismo, aunque con ciertas diferencias, recuerda inevitablemente al look que esa misma noche estaba luciendo otra conocida presentadora, Lara Álvarez, en la gala final de Supervivientes.
La asturiana también se decantó por un vestido marrón, pero con abertura en la pierna, y lo accesorizó con brazaletes gruesos, similares al par de Eva. Ambas presumen de estilos radicalmente distintos; una, devota de las atrevidas apuestas animal print, mientras que la otra prefiere los trajes monocromáticos o el eterno little black dress. A pesar de ello, han sabido interpretar la misma tendencia, cada una a su manera.
En 2021, el antes temido color marrón chocolate resurgió para reemplazar al negro en los estilismos de las invitadas de moda, desbancando la creencia de que esta tonalidad sienta bien a pocas mujeres. Más bien, destaca como una fórmula para resaltar el bronceado de las pieles blancas en verano al tiempo que prácticamente se camufla con las teces que sí han sido bañadas por el sol, especialmente si se complementa con accesorios dorados.