Los duques de Sussex han reaparecido públicamente en la entrega del Premio Nelson Mandela de la ONU, en Nueva York, donde el príncipe Harry ha pronunciado un sentido discurso en el que ha llamado a Meghan su 'alma gemela'. Es la primera vez que volvemos a ver a la duquesa en un acto formal desde su esperada aparición en Reino Unido, donde estuvo brevemente con motivo de las festividades por el Jubileo de Platino de Isabel II, y parece que por mucho que ha querido ceder el foco a su marido, las miradas se han posado sobre ella.
- Meghan apuesta sobre seguro y reaparece con un abrigo-vestido 'muy Kate'
Una nueva versión de su 'vestido' más aplaudido
La duquesa de Sussex ha sacado a relucir su faceta más sobria para un evento en cual el protagonista debía ser su marido. Bajo esta lógica, ha escogido un conjunto de top de mangas cortas y cuello a la caja con falda de tipo lapiz y largo midi adornada con bolsillos. Ambas piezas, que juntas se confunden con un vestido, llevan el sello de Givenchy y pueden adquirirse por 1.190 euros en total.
Y no se trata de una elección casual. Detrás de los momentos decisivos de Meghan se encuentra la casa francesa, más específicamente los diseños de la exdirectora creativa, Claire Wright Keller: su vestido de novia, el diseño de su primera cita con la reina Isabel II, el camisero de su debut en Ascot y, por supuesto, este sofisticado conjunto de dos piezas, que si te cuesta recordarlo es porque lo estrenó en su versión de color verde durante su primer Viaje de Estado como duquesa de Sussex, hace cuatro años.
- Meghan recupera su estilo más 'royal'
En cuanto a los complementos, Meghan ha optado por rescatar uno de sus bolsos favoritos, el modelo Bayswater grande, de Mulberry, elaborado con en Italia con piel burdeos; unos eternos salones negros, y sutiles brazaletes dorados, de Cartier. Su estilismo siguió la misma línea, con un peinado de coleta baja sleek y un maquillaje completamente natural.
El look de su debut internacional con bolso made in Spain
El primer dos piezas de Meghan firmado por Givenchy, en color verde botella, vio la luz en julio de 2018, cuando ella y Harry aterrizaron en Dublín para cumplir con las obligaciones reales de su primera Visita Oficial en pareja, lo que convierte a este look en aquel de su debut internacional. En su momento, lo llevó también en conjunto con otros complementos sobrios, eludiendo cualquier estridencia. Hablamos del elegante bolso tote made in Spain de la firma escocesa Strathberry, cuyo precio aproximado es de 580 euros, y unos salones de ante camel.