Asociamos siempre a Lily Collins con el estridente estilo del personaje que la catapultó como icono, la extrovertida Emily Cooper de Emily In Paris. Sin embargo, ahora que se ha puesto en pausa la filmación, la actriz ha reafirmado con sus últimos looks que la sencillez en la moda también es un arte a dominar. De hecho, a veces solo necesitas dos prendas para completar un estilismo primaveral que valga en cualquier ocasión, las 24 horas del día.
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Lo dice Lily Collins: necesitamos un camisero de cuero
Entre todos los posibles diseños de vestido para estrenar en primavera (con mangas abullonadas, estampado de flores, volantes al vuelo, favorecedores frunces en el abdomen...), destaca uno por su apariencia formal, perfecto para la oficina, que a la vez puede adaptarse a ambientes casuales si lo combinas con un par de zapatillas o bailarinas. Hablamos del vestido camisero que ha conquistado a Lily Collins, un ejemplar de largo maxi y mangas francesas que además está confeccionado en cuero.
Esto puede parecer una desventaja si el plan era llevarlo también en las calurosas mañanas de verano, pero lo que distingue a este de cualquier otro diseño es que vale todo el entretiempo, en noches estivales e incluso a lo largo del invierno, dado su tejido de piel aislante y sumamente estiloso.
El zapato con sello de aprobación royal que suma centímetros al instante
Su figura petite no le impidió atreverse con un vestido largo, sobre todo por la abertura en su falda, que aporta una apariencia de piernas más largas. Pero el verdadero truco de Lily Collins para sacar partido a su estatura ha sido uno sacado directamente del armario de las royals. Ha utilizado unos salones nude semitransparentes con tiras de piel burdeos que estilizan el pie, algo que ya habían comprobado la reina Letizia o Máxima de Paises Bajos con sus propios diseños de p.v.c.
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Su look de belleza tiene mucho que ver con este cambio radical de estilo que la separa de su personaje. La intérprete ahora lleva la melena en tonos cobrizos -tendencia beauty que desplaza al castaño después de meses de supremacía de los tintes oscuros- con su característico largo desgrafilado y un flequillo de cortina que enmarca su rostro. Finalmente, ha rematado el conjunto con anillos de oro y diamantes, de Cartier, que nos llevaron a admirar su nueva manicura francesa.