La sastrería ha sido desde su invención un oficio sostenible por excelencia, al ser ropa hecha a medida, de manera artesanal y personalizada. La confección de un buen traje, con su americana de solapas, una camisa impoluta y pantalones perfectamente entallados. Si bien con el paso del tiempo esta práctica se fue perdiendo, es de las pocas labores tradicionales en la moda que se mantienen, e incluso son muchas las marcas emergentes que han decidido retomar estos valores bajo una óptica práctica, genderless y de plena consciencia ambiental.
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El traje sustituye al vestido
El dos piezas ejecutivo hizo su transición natural al armario femenino para ayudar a las mujeres a conquistar el mundo en esta nueva aventura fuera de los confines del hogar. En un principio, muchas no estuvieron convencidas. Las blusas de gasa, las faldas lápiz y los zapatos de tacón hacían muchos más favores a su cuerpo, así que el traje debía cambiar si quería ser considerado unisex y no solamente un conjunto prestado de la sección masculina. "La construcción de un sastre es muy similar para mujer que para hombre. Sin embargo, las necesidades cambian en cuanto al fit o patrón. La mujer siempre agradece un entalle en cintura, una hombrera más estructurada o un tejido con elastán que se adapte mejor a su figura", asegura Blanca Rodríguez, directora y fundadora de Bleis Madrid.
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Un nuevo uniforme para las royals españolas
Las mujeres de la realeza se retratan como personajes magnánimos, con sus impresionantes vestidos de gala y sus tiaras históricas, pero al realidad es que, en el siglo XXI, es frecuente que reemplacen estas lujosas creaciones por otras mucho menos estrafalarias, como el perfecto traje de primavera. El pasado mes de marzo, Victoria de Marichalar acudió a la presentación cartel de la Feria de San Isidro 2022 con un traje estampado de raya diplomática elaborado con paillettes blancas y negras que dejó a todos sin palabras.
Se trata de un dos piezas, obra precisamente de Bleis Madrid, compuesto por una blazer de hombreras pronunciadas y un pantalón recto a juego, look que sellaba la transformación de la hija de la infanta Elena en referente de estilo. Mucho más discreta, su tía doña Letizia, quien apenas unos días antes se decantó por un conjunto de chaqueta y pantalón en color lila cortesía la misma marca para una importante cita de día en La Palma.
- Las joyas 'made in Spain' ponen de moda la sostenibilidad
De día o de noche, con zapato plano o de tacón, los nuevos trajes -renovados con distintos colores, texturas o favorecedoras siluetas- están desplazando a los vestidos en el repertorio de las royals más estilosas de España... Y quizá Blanca Rodríguez tenga mucho que ver en eso: "El hecho es que Bleis en sus inicios era un traje dedicado el evento. Hace seis años que pusimos las hombreras de seis centímetros en todos nuestros sastres y la lentejuela era nuestro tejido fetiche. Luego, ha sido al revés y nos hemos ido adaptando a los nuevos momentos y a sacar realmente el sastre a la calle"
En París, arrasa el traje made in Spain
Y es que más allá de nuestras fronteras, las embajadoras de moda más reputadas están exigiendo la pericia propia de la sastrería española, opacada en décadas anteriores por la reputada legendaria italiana o el refinamiento inglés de Savile Row. De ello puede dar fe la diseñadora Andrea Castillo, que en plena pandemia consiguió materializar su primera colección cápsula de básicos sostenibles, de la mano de su compañera Laura, y llegar en cuestión de un par de años a presentarse en Paris Fashion Week, la meca de la alta costura.
Su firma, ByniumaAL, exalta los pilares del minimalismo con prendas de calidad, que a la vez ofrecen comodidad, seguridad y una feminidad especial, distinta de aquella que asociamos con los vestidos de flores o las minifaldas. En un panorama que celebra el glamour en sus dosis máximas como reacción lógica a la austeridad del confinamiento, la sobriedad es casi un atrevimiento, pero lo cierto es que un buen traje jamás pasará de moda: "Yo iba un poco preocupada porque, al fin y al cabo, ByniumaAL es un estilo muy sobrio y tenía miedo de quedarme por debajo de las expectativas. Pero la verdad es que nos sentimos muy apoyadas por todo el mundo", nos confiesa Andrea días después de su gran hazaña.
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Del armario de nuestros padres al nuestro
La tradición familiar juega un papel crucial en la idea que tenemos del traje. Más allá de los personajes ejecutivos en las películas, la imagen más cercana que tenemos de este working look cuando estamos creciendo viene de nuestros propios padres. Ahora que se busca recuperar la herencia con un enfoque moderno, todo producto de la incertidumbre que sobrecoge a las generaciones millennial y centennial, la ropa sartorial vuelve a cobrar sentido. Para las mujeres jóvenes, es un símbolo de empoderamiento y arraigo que a su vez puede llevarse con camiseta y zapatillas, de manera muy distinta a como se combinaba una o dos décadas atrás.
En este legado encontramos el motor principal de muchas de las firmas que se están haciendo con el mercado español. Andrea Castillo creció entre patrones y máquinas de coser, fascinada por un mundo que -a pesar de la cercanía- le resultaba ligeramente ajeno incluso después de acabar la carrera de Derecho. A través de su empresa familiar, floreció un interés tardío por los trajes que tanto había visto a los hombres de su familia y que muchos años más tarde parecían hechos específicamente para ella: "Me gustaba como me sentía cada vez que les quitaba a mi padre y a mi abuelo sus blazers. Me sentía segura, guapa, poderosa… Me costaba encontrar una blazer de mujer de calidad (con sus ojales de pera, sus acabados interiores, la entretela picada, solapas pulidas)".
Para Blanca Rodríguez, la motivación también proviene de casa. La sastrería fue un punto de conexión con su padre, que falleció poco antes de lanzar oficialmente la marca en el año 2014. Él era un amante de los trajes a medida y, con cada colección, la diseñadora pretende homenajear al que es y será siempre la fuente de inspiración de Bleis Madrid. Recientemente, volver a los orígenes se repite como un mantra entre las jóvenes diseñadoras de nuestro país con dos pilares claros: la tradición y la naturaleza.
Los materiales, la esencia de la sastrería sostenible
Estas firmas se han decantado por fibras naturales de origen orgánico y materiales reciclados (y reciclables) con fin de reducir su impacto medioambiental y asegurar productos de mayor durabilidad. Ha sido todo un reto, pues los tejidos sostenibles se fabrican exclusivamente para cada marca y no al mayor, como el poliéster o el acrílico. Desde ByniumaAL, cuyo concepto es inseparable de la moda ética, confirman los obstáculos de emprender bajo esta filosofía: "Es muy complicado trabajar con tejidos sostenibles, son mucho mas delicados y a la hora de confeccionar la prenda hay que ir con muchísimo más cuidado, lo que provoca un aumento de tiempo y de costes. Es menos eficiente productivamente hablando"
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En los últimos años, el traje ha pasado a ser una prenda más, tan asequible como unos vaqueros, gracias a los esfuerzos de Inditex, Mango, H&M y otros gigantes del fast fashion por democratizar la moda. Como es lógico, es imposible satisfacer la demanda masiva haciendo uso únicamente de materiales sostenibles o reciclados, sin una cadena de producción automatizada. ¿Podrías diferenciar un traje de poliéster de uno hecho a medida?
Sobre esto, Blanca Rodríguez tiene una postura firme, avalada por la calidad que caracteriza a las piezas de su marca: "Nuestros sastres se caracterizan por tener una estructura fuerte, de hombrera siempre importante y un tejido con cuerpo. Se nota en el fit, invertimos mucho tiempo en el desarrollo del patrón perfecto y a día de hoy es lo que nos diferencia".
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También los hombres buscan sosteniblidad
El taller de toda la vida está mutando. ¿Habías oído hablar de la sastrería online? Aquellos días en los que un maestro costurero se encargaba de medir cada centímetro meticulosamente están quedando en el pasado. Hace exactamente 13 años, tres jóvenes veinteañeros decidieron fundar Hockerty, una startup que recupera la sastrería tradicional a medida para todos los bolsillos. Desde entonces, cuentan con más de 250.000 clientes en 142 países. El proceso permite elegir entre 500 tejidos diferentes -entre los que se incluyen tweed, lana, algodón, lana merino y terciopelo- que serán adaptados a tus medidas tras completar un cuestionario. Su avanzado diseñador 3D hace posible que, sin necesidad de pasar horas en la tienda sometiéndote a varias pruebas, consigas tu traje ideal a medida.
Si bien los hombres han estado acostumbrados desde niños a lucir el sastre en cualquier ocasión y gozan por ello de cientos de alternativas, progresivamente las mujeres están dando ese salto para abordar los distintos estilos del armario femenino desde una mirada sartorial. Y es una decisión más que rentable, así nos insisten desde Bleis Madrid: "Es una prenda cómoda, versátil y tremendamente elegante. Dudo que pase de moda, hay mil y un maneras de reinventar el sastre y los que nos dedicamos a esto lucharemos para que siempre sea tendencia".