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Madrid ha vuelto a la vida estos últimos meses con la reapertura de sus espectáculos más ansiados, por lo que noches como la de ayer, en la que se celebró la inauguración de WHAH, un disruptivo show de música y gastronomía, vuelven a resultar habituales. Entre sus selectas invitadas encontramos a Ana Fernández, María Castro o Anna Ferrer, aunque quien destacó con el look más original fue Eugenia Martínez de Irujo. Gracias a esa misma osadía con la que lució una falda semitransparente de flecos en el Festival de San Sebastián, ha reafirmado su preferencia por la artesanía española al decantarse por un innovador estilismo con plumas y bordados.
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- Viaje al centro de la colección de Teresa Helbig: la diseñadora nos habla de sus novias modernas
Su nuevo atrevimiento: un original chaleco de plumas
La aristócrata, quien mantiene un idilio de moda con los estampados llamativos y los colores potentes, cambió de registro sin dejar de lado los pilares de su armario: el diseño nacional y los detalles especiales. Escogió para la ocasión un mono crudo de crepe de seda con cinturón metálico en dorado, el más elegante sustituto para un vestido de gala, y un chaleco de plumas con colibríes bordados en colores pastel, cortesía de Teresa Helbig.
En el boceto original del conjunto ideado por Helbig, podemos apreciar la fluidez del pantalón palazzo, un modelo con poder de estilizar la figura al máximo sin necesidad de llevar un traje ajustado o recurrir a tacones altísimos. La creadora ha asistido en varias ocasiones a la duquesa de Montoro con su vestuario de invitada y recientemente vistió a su hija Tana Rivera con un maravilloso diseño 'fantasía' para la boda de los Condes de Osorno, que tuvo lugar el pasado mes de mayo.
Joyas con significado (y de diseño propio)
La publicación de esta última imagen en sus redes sociales dejaba ver la sorpresa escondida en la parte posterior del traje, un delicado corte que deja parte de la espalda al descubierto en la zona del torso. También reveló la conexión íntima que mantiene con su elección de joyería, elemento primordial del estilismo. Se trata de una serie de piezas sacadas de su colección exclusiva en colaboración con la firma Tous, la cual fue bautizada Save (Salvar) por trazar a través de cada brazalete, pendiente o collar recorrido por la naturaleza de la mano de siete animales en peligro de extinción.