El pasado domingo se celebró la gala híbrida de los Premios Grammy, donde, como es costumbre, pudimos presenciar los arriesgados estilismos de las estrellas destacadas de la música. Entre ellas, Beyoncé, que hizo historia consiguiendo cuatro galardones. Este hito la ha convertido en la mujer que más gramófonos dorados ha ganado en la historia de la gala, sumando 28 y superando así a la Alison Krauss. Durante la ceremonia, deslumbró en un diseño de piel en negro con llamativos complementos dorados, de Schiaparelli. ¡Y no paró de sorprender! Tras su gran victoria, la llamada Queen B salió a celebrar junto con su esposo, el rapero Jay-Z, en un impactante vestido plateado, de Burberry, casi tan brillante como su colección de premios.
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Un look de estatuilla
La celebración de un récord histórico merece, como es lógico, un estilismo a la altura del logro. Por ello, la galardonada artista trabajó con la estilista Zerina Akers para crear este deslumbrante look plateado, de Burberry. Akers también trabajó con las protegidas de Beyoncé, Chloe X Halle, en sus propios looks en conjunto para la gala. El corsé enjoyado con cristales colgantes, hecho a medida, tiene un diseño de manga larga con lentejuelas que bañan al completo el look.
Cierra con broche de plata
Aunque el vestido fuera ya una declaración de intenciones en sí mismo, Beyoncé añadió un turbante a juego con velo transparente, que podría suponer un guiño al obligatorio uso de la mascarilla en tiempos pandémicos. Con respecto a la joyería, la cantante optó por unos potentes aretes de aro, cortesía de Lorraine Schwartz, que presentaban unas gotas de diamantes de 50 quilates en forma de pera.
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Alto impacto de estilo en su gran noche
Horas antes de acaparar los flashes con su luminoso Burberry, la intérprete se preparó para recibir sus premios en una apuesta muy ochentera, firmada por Schiparelli Haute Couture. Consistió en un minivestido funcido con hombros descubiertos, guantes largos de cuero con detalles de uñas de oro, medias negras y dramáticos pendientes colgantes que encarnan la estética surrealista de la casa italiana. Su pelo, por otro lado, se veía especialmente voluminoso, reforzando los aires vintage de un look que quedará para la historia.