Cárdigan de punto, el básico que ha unido a modelos y estilistas

Hay vida más allá de los jerséis de punto, palabra de las prescriptoras que más entienden sobre moda. Y muy a pesar de la versatilidad y comodidad de esta pieza, que tantos quebraderos de cabeza soluciona en nuestro día a día, vuelve pisando más fuerte que nunca una prenda que teníamos escondida en el armario: el cárdigan de punto. Y si es con corte cropped y con varios botones desabrochados, mucho mejor. En un nuevo intento de lograr la ansiada estética vintage que modelos como Kendall Jenner, Kaia Gerber o Gigi Hadid persiguen en cada uno de sus estilismos, la chaqueta abotonada de toda la vida se reinventa para ofrecernos un estilismo informal, fácil de combinar y, sobre todo, favorecedor.

En el color estrella de la temporada: el lila

Tal y como lo adelantaba la mismísima Katie Holmes hace unos meses, la prenda que mejor combina con el cárdigan de punto abotonado son los vaqueros de tiro alto porque potencia el toque retro que está tan en augue. 

Cárdigan de punto ancho en color lila, de H&M (24,99 euros)

Cárdigans cropped abotonados 

Kendall Jenner ha sido la última en sumarse a esta tendencia y, como siempre, lo hace como mejor sabe: con un estilismo magistral, luciendo unos vaqueros negros confeccionados en doble tono y un bolso baguette con estampado animal de cebra. Un look sencillo, pero de plena tendencia.

Cárdigan corto abotonado en color gris, de Zara (19,95 euros)

Confeccionado en punto ancho

Podríamos definir a Anne Laure Mais como la experta por excelencia, junto con Jeanne Damas, en cómo llevar el cárdigan cropped y que siempre quede bien. La influencer y diseñadora lleva apostando por esta tendencia muchos años, aportando con esta pieza a cada uno de sus looks ese aire francés que tanto la caracteriza. Tanto es así, que su propia firma, Musier Paris, está repleta de diseños iguales a los que lleva en la imagen. 

Cárdigan con mangas abullonadas, de Pull&Bear (29,99 euros)

Con un color vibrante y los botones desabrochados

Bella Hadid lo tiene claro, su manera favorita de llevar los cárdigans cortos es abrochando solo uno o varios botones, para así dejar al descubierto sutilmente el ombligo. Está causando tanto furor, que no hay precursora de moda que no se haya sumado a esta fórmula estilística.

Chaqueta de punto con botones, de The Row (800 euros)

Tendencia patchwork

Gigi Hadid confirma que la tendencia imparable de este invierno son las piezas de patchwork, que consiste en mezclar varios estampados o tejidos en uno solo. Y si a esto le añadimos que no es la primera vez que luce un cárdigan con este print, no será de extrañar que ahora las prendas de punto se reinventen adoptando esta forma mucho más especial.

Chaqueta confeccionada en patchwork, de Stella McCartney (695 euros)

Multicolores

Ya lo propusieron Zagid and Voltaire o Laagam hace unos meses. Este temporada los cárdigans largos y abotonados van a estar muy de tendencia, eso sí, siempre y cuando esten teñidos con infinidad de colores, tal y como vemos a Helena Cuesta en la fotografía. ¿El mejor truco para combinarlos? Apostar por prendas básicas que cedan el protagonismo a la prenda de punto multicolor. 

Cárdigan largo con estampado multicolor, de Zagid and Voltaire (350 euros)

En colores pastel

El truco de Jeanne Damas está en combinar el cárdigan de colores con dos prendas básicas: o con unos vaqueros altos con aires vintage o con vestidos satinados largos, que combinados con esta pieza rebajan el tono elevado del look, resultando estilismos arriesgados, pero siempre acertados. 

Cárdigan en color verde lima, de & Other Stories (89 euros)

Con bordados de inspiración floral

Este jersey se ha convertido en un autentico objeto de deseo estos últimos meses, y lo que le queda porque las prendas de punto con bordados de todo tipo y la inspiración floral serán tendencia esta primavera 2020. Sabina Socol lo combina a la perfección con unos pantalones chinos de talle alto, aportando al look un toque muy parisino.

Cárdigan diseñado en punto con ochos, de Alessandra Rich (665 euros)