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susannagriso portada© Gtresonline

El mono de invitada de Susanna Griso compite con los vestidos de fiesta

De fiesta, cena de empresa o boda, la prenda de la periodista funciona en cualquier cita de los próximos meses


Actualizado 23 de octubre de 2019 - 18:02 CEST

Anoche, Madrid albergó la V Edición de los Premios Interiores, una ocasión en la que se reunieron actrices, modelos y presentadoras de renombre del panorama nacional. Entre ellas, Susanna Griso, que fue una de las invitadas que decidió arriesgar -como ya hizo en el encuentro en Palacio del Día de la Hispanidad- con un look muy original. La periodista llevó un mono de terciopelo azulado, un tejido que suele volver con fuerza cada año en esta época, pero más especialmente este Otoño/invierno, ya que no ha faltado en las propuestas de Paco Rabanne, A.W.A.K.E. o Miu Miu. En sus desfiles, el material se ha convertido en el indiscutible protagonista, ya que forma trajes de inspiración masculina, vestidos XL y conjuntos de dos piezas de falda y americana.

Susanna Griso© Gtresonline
La periodista lució su media melena suelta y peinada con las puntas hacia fuera.

La elección de la periodista fue la sofisticada prenda de una pieza que se ha convertido en la nueva predilecta de las invitadas a una boda ya que es incluso capaz de competir con cualquier vestido de fiesta. De cuello caja y manga de hombro caído, el diseño dejaba los brazos al descubierto. Elegantemente, la prenda cerrada se ajustaba a su silueta hasta la zona de la cadera, terminando en unos pantalones palazzo de mayor anchura. Ya que el terciopelo suele tener un acabado brillante, Susanna lo potenció con complementos en plateado, unas sandalias de tacón de tira ancha y una cartera de mano a tono.

Susanna Griso © Gtresonline
Las únicas joyas que escogió para el evento fueron pulseras plateadas y una diminuta cadena.

Al haber apostado por un look minimalista, Susanna pudo permitirse apostar por un maquillaje de impacto que complementara su elección. Por ello, la periodista apostó por un ahumado degradado -más claro en la zona del lacrimal que se iba oscureciendo- y máscara que realzara sus pestañas. Además de un suave colorete rosado, un tono que favorece tanto a rubias como a morenas, escogió un pintalabios a tono más saturado y de textura glossy.

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