El color blanco se ha convertido este verano en el gran aliado de Eva Longoria para conseguir potentes estilismos tanto de street style como de fiesta tal y como demostró recientemente en su visita a Marbella. Ahora, la actriz da un paso más y, directamente, ficha esta tendencia en el universo nupcial. Así lo ha dejado patente este fin de semana durante su participación en la Haute Living Cover Dinner en Miami donde ha conseguido que un vestido de novia se convierta en la mejor elección para un look de invitada. Una decisión a la que acompañan detalles con truco capaces de favorecer a mujeres que, como ella, no superan el 1,60 metros de altura.
Para la ocasión, la estadounidense, de 44 años, ficha una creación en color blanco de la firma Samantha Rose. Concretamente, se trata del modelo Stellina que figura como una de las propuestas nupciales de este sello australiano. Sin embargo, Eva Longoria se decanta por una versión en largo midi (355 euros) en lugar de la que alarga la falda y la remata con cola (401 euros). Con este sencillo gesto, consigue no solo aumentar su altura visualmente, sino que resta formalidad a su imagen y la adapta a su imagen como invitada muy acertadamente.
También juega a su favor el corte tipo wrap de este vestido, así como el juego de plisados en 3D que realzan pecho y equilibran las caderas. Como complemento, busca equilibrar su silueta con un calzado al tono. Para ello, apuesta por el modelo Portofino de Gianvito Rossi. Un diseño que puede adquirirse con descuento por 376 euros y que presenta una tira de PVC en el empeine con el que la actriz consigue fijar mejor su pisada y aguantar mejor los casi 11 centímetros de tacón que acompañan a este accesorio.