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Hace tiempo que las joyas se convirtieron en símbolo de los vínculos más especiales entre las personas. De esos instantes en que, de alguna manera, marcan el paso del tiempo: el nacimiento de un hijo, un aniversario especial, un cumpleaños inolvidable… Uniones que Chaumet refleja en Liens Évidence. La firma de alta joyería, cuyos orígenes se remontan hasta 1780, siempre ha tratado de crear piezas capaces de transmitir una historia. Las de esta colección están inspiradas en el amor que unía a la emperatriz Joséphine, la musa de la Maison, con Napoleón. Diseños con vocación de icono que buscan unir destinos y sellar las etapas más importantes de la vida.
Son las líneas entrecruzadas de algunas de sus joyas las que simbolizan los caminos de dos personas que se cruzan para llegar, juntos, a su destino. Caminos de amor, como el de una pareja que decide emprender un proyecto de vida en común, lleno de emoción y riesgo; o de amistad, dos amigas que se eligen para compartir buenos y malos momentos y, sobre todo, estar cuando la otra la necesite. Una forma de dar las gracias por el apoyo y el cariño. Pero hay más, una dimensión afectiva que se deja ver en la búsqueda de lo infinito.
Las joyas también son capaces de mostrar la emoción que una madre siente cuando ve que su hija ha alcanzado la mayoría de edad, llega a la edad adulta y empieza una nueva etapa. O las sensaciones de una abuela al conocer la noticia de que su nieta se ha comprometido. Cambios de etapa que derivan en un sentimiento, la alegría de quienes rodean a quien los experimenta, y en un recuerdo que busca permanecer siempre. Aunque quizá son las experiencias más fuertes las que generan otro tipo de vínculos, los inquebrantables. Una pareja que, fruto de su unión, va a tener un hijo. Una vida que llega dispuesta a cambiar su rutina y a hacer que descubran uno de los amores más puros. Momentos, circunstancias y situaciones que crecen, se multiplican y de los que muchos quieren conservar un recuerdo.
Todas esas sensaciones están recreadas en las piezas de la icónica Liens Évidence que se puede descubrir en la primera boutique de Chaumet en España, ubicada en el madrileño barrio de Salamanca. Atemporales y refinadas, para ella y para él. La colección cuenta con una gama de anillos, pulseras y pendientes que juegan con diferentes materiales y colores. Diseños que se pueden llevar por separado pero que funcionan unidos como símbolo de todos esos momentos especiales que se han ido acumulando con el paso del tiempo. Además, ahora muchas de sus piezas son más grandes y masculinas para que también ellos puedan lucirlas.
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