Cualquier ocasión es buena para ponerse de largo parece ser el mantra de estilo de Kim Kardashian. La empresaria que acudió este jueves al programa televisivo de entrevistas The Tonight Show presentado por Jimmy Fallon y allí volvió a sorprender a sus seguidores con un vestido de fiesta con el que resultaba imposible no convertirse en el foco de todas las miradas. De estampado de serpiente, cuello alto, hiper-ceñido al cuerpo y cubierto de lentejuelas, el diseño parecería por esas características un modelo de tendencia que acaba de aparecer en cualquier pasarela. Sin embargo, la anécdota era otra. Ni nuevo, ni reciclado, este diseño creado en los ochenta estaba destinado por su creador a iconos y mujeres muy sugerentes. Y como si de un hechizo se tratase, treinta años después, la empresaria lo ha hecho suyo convirtiéndolo en la tendencia más actual.
El vestido fue creado en 1983 por Thierry Mugler y forma parte de la colección Marie Python, un nombre más que apropiado viendo el motivo dibujado sobre la tela del vestido. Y es que gracias a las paillettes cosidas por todo el tejido a modo de escamas hacen que la propia Kim Kardashian se asemeje a una sinuosa serpiente. Poco imaginaría la estrella de televisión a los tres años de edad, que el polifacético diseñador francés estaría confeccionando un diseño que llegaría a lucir más adelante con una pequeña diferencia, la segunda abertura de la creación, corte que aparece sobre la pierna, se quedaría en la década de los 80.
Actualizar un estilismo es tan sencillo como añadirle complementos de tendencia, algo que, si bien no era del todo imprescindible en el caso del modelo vintage, Kim Kardashian tuvo en cuenta. Y es que acompañó su look con un peinado acorde por su inspiración retro: llevó el cabello recogido con dos mechones sueltos por delante. Respecto al maquillaje, Mario Dedivanovic fue el responsable de crear unos ojos ahumados utilizando los mismos tonos tierra que el vestido y unos labios en color marrón degradado.