Amaia Salamanca y los tres detalles que convirtieron su look en un éxito rotundo

En su último evento, la actriz apostó por la tendencia irisada, pero fueron otros los toques que le hicieron brillar

por hola.com

La fascinación de los millennials por los brillos irisados y la purpurina ha convertido criaturas mitológicas como los unicornios o las sirenas en fuentes de inspiración que copan tanto la pasarela (la colección de Primavera/verano 2018 Moschino es la prueba más reciente de ello) como las redes sociales. Esto se traduce en que los brillos metalizados no solo han venido para quedarse, sino que han traspasado la frontera de las colecciones de fiesta del invierno para llegar hasta los estilismos de verano. La última prueba de este nos la ha dado Amaia Salamanca, que elegía un total look satinado para acudir junto a su pareja Rosauro Varo a la fiesta del décimo aniversario de la productora española Bambú.

La empresa de ficción aprovechó su aniversario para reunir a algunas de las caras más conocidas del sector. Blanca Suárez y Mario Casas fueron los más buscados, pero también Amaia Salamanca acaparó flashes gracias a su estilismo. Si bien hace unos años se declaraba contraria al nude y lo definía como "el color que menos le gustaba", anoche se decantó por esta tonalidad para su original conjunto de dos piezas formado por una falda y un top camisero en tono maquillaje con reflejos plateados de Santos Costura, una de sus marcas de cabecera. El primer toque diferenciador de su look, muy comentado a raíz del acabado brillante, se encontraba en el cuello de la camisa, donde llevaba unas pequeñas flores cosidas, convirtiendo las puntas en un ingenioso cuello-joya.

Para rebajarle seriedad al modelo, la intérprete de En tiempos de guerra dejó desabrochados los dos últimos botones y cerró la camisa con un nudo. Con este segundo detalle, Amaia consigue transformar una blusa sin mangas de corte clásico en un top corto y se suma al front knot, la tendencia de la temporada que mejor se adapta a todos los tipos de cuerpo. La falda, un modelo con algo de vuelo de cintura alta, llegaba hasta los pies de la actriz ocultando casi por completo unas sandalias de tacón plateadas de doble tira de la firma Ursula Mascaró, totalmente en línea con los reflejos que desprendía el diseño semi transparente.

Muchas estrellas el cine o la música aprovechan las grandes ocasiones que suponen las entregas de premios, fiestas o presentaciones delante de las cámaras y la visibilidad que eso conlleva para apoyar a firmas españolas de moda, y la actriz madrileña no dejó pasar esta ocasión para hacerlo. Y es que pese a los centelleos del vestido, el centro de atención del estilismo se lo lleva el bolso, un diseño de cuero redondo en rosa pastel con una cabeza de león, en el que se puede reconocer la mano de Andrés Gallardo, el diseñador de joyas que ha hecho de la porcelana su rasgo más distintivo. El modelo, que cuesta 575 euros, es el tercer toque diferenciador que borda el estilismo de la intérprete.