Victoria Beckham, adiós a los tacones
La diseñadora ha cambiado sus 'stilettos' por sandalias planas, ¿qué le ha llevado a este cambio?
Lejos quedan ya los tiempos en que Victoria Beckham era una de las reinas del pop junto a sus compañeras de las ‘Spice Girls’ y lucía ‘looks’ imposibles. Ahora, es todo un icono de estilo y buen gusto, pero la diseñadora nos la ha vuelto a jugar. A principios de este año, la cantante convertida en diseñadora tuvo una ‘mala racha estilística’, a saber: jerseys ‘oversize’, ‘sneakers’ en lugar de sus ‘stilettos’… ¡Toda una sorpresa!
Por suerte y como ya hemos dicho, solo fue una racha. Desde hace unos meses hemos visto a Victoria bordar ‘total looks’ o demostrar cómo lucir un ‘trench’ amarillo limón con mucha clase, solo ella podría hacerlo. Hasta viajar con toda su familia no la impide demostrar todo su estilo. Sin embargo y sin previo aviso ayer, Victoria volvía sus ‘outfits’ demasiado relajados. ¡¿Por qué?!
La diseñadora salió de su casa neoyorquina enfundada en una blusa negra (hasta aquí todo bien), un pantalón al más puro estilo ‘safari’, todo de su firma y unos ‘ugly shoes’ en negro firmados por Céline (830 €). ¡Ay! ¿Otra vez te dejas los tacones en el vestidor? ¿Y qué pasa con ese pantalón ‘baggy’?
Después de recuperarnos de este susto, empezamos a atar cabos. Mañana comienza la New York Fashion Week, en la que desfila la firma homónima de Victoria y, tal y como hemos podido espiar en sus redes sociales, es el momento de elegir al casting de su ‘fashion show’. Esto quiere decir horas y horas viendo a modelos, probándoles sus diseños y dando las últimas puntadas a la colección. Victoria se está enfrentando a jornadas maratonianas de trabajo a las que duramente podría hacer frente subida a unos tacones y prendas ajustadas.
Y es que, por mucho estilo que se tenga, a veces hay que dejarlo de lado para priorizar tu comodidad. Esperemos que, una vez acabada la semana de la moda, vuelva a nosotros nuestra Victoria de siempre y pueda volver a liderar nuestros mejores looks de la semana. ¡Vuelve!