El nuevo vestido camisero: Manual de uso
Sin duda, el vestido camisero forma parte de ese privilegiado grupo de básicos atemporales que no pueden faltar en nuestro armario. Más sugerente, satinado, extra-largo… descubre las revisiones de este clásico que te cautivarán esta primavera-verano
Son cómodos, funcionales, frescos y adaptables a las veinticuatro horas del día. Los vestidos camiseros se integran en ese selecto elenco de básicos todoterreno que, temporada tras temporada, se adueñan de nuestro vestidor apelando a la versatilidad y a la sencillez de sus formas —lo mismo que sucede con el blazer marino, el pantalón negro o la camisa blanca—. Sin embargo, atemporalidad no quiere decir inmutabilidad. Y es que el vestido camisero consigue reinterpretarse con el paso del tiempo mostrando su cara más naïf, minimalista, romántica o incluso sugerente. ¿Quieres ver qué modelos se llevarán esta primavera? Las celebrities te muestran cuáles son y cómo lucirlos.
Si la pasada temporada fue Olivia Palermo quien ponía el punto de mira en los vestidos camiseros, ésta han sido Lily Aldridge y Behati Prinsloo las encargadas de sacarlos a la palestra. Desde luego, para esta prenda todo son ventajas, consiguiendo mudar su esencia con sólo cambiar de accesorios. Por ejemplo, Olivia Palermo combinará un modelo con tablas en el bajo con un bolso de mano, sandalias de vértigo y una camisa a la cintura, completando el perfecto estilismo after-work. Mientras, Lily Aldridge y Behati Prinsloo se harán con dos versiones midi —una en lino y otra satinada— junto a mules planos y bolsos messenger, ideales para un tranquilo día de compras.
Eso sí, si de versatilidad se trata, Karlie Kloss y Kate Bosworth nos recuerdan que el camisero denim es precisamente el más funcional de todos. Tanto podrás adoptar un vestido midi de talle ajustado para un look lady, como hacerte con la fórmula mini más ‘casual’ junto a unas buenas deportivas o decantarte por el patrón más trendy a medio camino entre el pichi y el camisero. Si pensaste que el vaquero sólo estaba hecho para las citas más desenfadadas, acabas de comprobar que no tiene por qué ser así, pudiendo elegir una silueta más sofisticada. Eso sí, si buscas un camisero igual de combinable, pero más veraniego, no dudes apostar todo al blanco neutral.
El vestido camisero blanco aborda la primavera-verano con un único propósito: demostrar que puede adaptarse a cualquier largo, estar confeccionado en diferentes materiales y lograr conquistar todos los contextos. Más allá del formato clásico de largo midi, cuello almidonado y botonadura infinita; esta temporada también se abren paso las versiones extra-cortas y las reinterpretaciones en clave lencera. Los minivestidos camiseros toman así la palabra con sus líneas rectas cayendo despreocupadas, sin ataduras ni cinturones, y sucumben a materiales como el encaje o el crochet en su versión más femenina. A la hora de completar un estilismo de órdago, unas sandalias de tacón y un bolso serán los únicos accesorios que necesites.
Los materiales en los que se confecciona han mutado y el patronaje también. Si el otoño llamaba a las blusas pussy-bow —caracterizadas por lucir una lazada en el cuello—, los vestidos inspirados en esta prenda no se quedarán atrás. Caroline Issa ha sucumbido a esta revisión del tradicional camisero con un vestido a rayas bicolor, al que suma un cinturón que delimite su silueta y unos zapatos planos. Sin duda, podemos inspirarnos en ella para un outfit digno de conquistar la oficina. Giovanna Battaglia, sin embargo, se hará con una versión reducida, provista de una falda de tablas y elaborada en un tejido más vaporoso, apto para la subida de los termómetros. Sus accesorios marcarán tendencia, poniendo la nota de color a este perfecto outfit estival. Pero no sólo de vestidos monocromáticos o bicolores vive el street style, encabezando sus opciones predilectas el camisero estampado en clave retro.
Entre los prints más socorridos, los motivos florales se hacen con los modelos más frescos y románticos, en un juego óptico sumamente atrayente. Así, las flores germinarán sobre modelos de largo midi con cierto estilo naïf y un guiño a la estética retro de los años 50. Precisamente, la misma reminiscencia al New Look que hemos podido ver en contextos más formales, como lo ha sido el festival de Cannes. Y es que el clásico glamour hollywoodiense vuelve a tomar forma alrededor de camiseros a media pierna, siluetas de altos vuelos y cinturas ceñidas hasta la extenuación. Entre nuestro favoritos se cuela el modelo Dior Couture que lució recientemente Kirsten Dunst, casi tan llamativo como el camisero estampado con el que vimos a Lupita Nyong’o.
Cuando cae la noche, los maxi-vestidos camiseros hacen de la sofisticación una máxima y de la elegancia su estandarte. Es en este contexto cuando entran en juego las faldas de tablas y los modelos provistos de una o dos amplias aberturas delanteras. Celebrities como Olivia Palermo o Alessandra Ambrosio se decantarán por camiseros monocolores de cintura marcada y tejido satinado, convertidos ya en objetos de deseo irresistibles para erigirse como la perfecta invitada.
Tras ver las revisiones que se han hecho con la primavera, ¿ya tienes en el punto de mira tu favorita? Pues antes de hacerte a la calle, echa un vistazo a estas propuestas con las que acertarás seguro.
1. Vestido camisero con volante, de TRF (25,95 €); 2. Vestido denim con cinturón, de Banana Republic (84,95 €); 3. Con cuerpo de encaje, de Vero Moda (44,95 €); 4. Modelo Hoops, de Pepe Jeans (94,95 €); 5. Con cuadro vichy de estilo retro, de Sea (555 €); 6. Vestido camisero midi, de Intropia (195 €); 7. Modelo estampado, de Zara (29,95 €); 8. Modelo semitransparente, de Unique (360 €).