La Riviera Francesa, French Riviera o Côte d'Azur en el idioma francés original, es precisamente eso: una línea de costa en el borde marítimo del sur de Francia, de color azul intenso que brilla casi 365 días al año bajo el sol mediterráneo. La Costa Azul volverá a protagonizar las mejores escenas de la jet en los próximos días, una vez el Festival de Cannes, uno de los diminutos emplazamientos que hilvanan esta zona, abra sus puertas en su nueva edición, atrayendo lo mismo a actores y actrices de renombre internacional, que a supermodelos y aristócratas.
La escena se repite igual, cada año, desde hace casi 70 años: Cannes organizó su festival de cine por primera vez en 1946, lo que explica que cada edición sea aún más exclusiva que la anterior, tanto en fiestas como en el despliegue fashion que veremos en la alfombra roja y en las calles de la ciudad. Pero, ¿por qué la Costa Azul es sinónimo de lujo y glam? ¿Qué hace especial este rincón del Mediterráneo? El estilo de la Riviera Francesa no puede compararse al de ninguna otra ciudad costera del mundo, ni siquiera con las más lujosas que despuntan hoy en día (por ejemplo los rascacielos a pie de playa de Dubai), porque es algo que lleva fraguándose más de cien años: por las playas de arena blanca de ciudades como Niza, Cannes o Saint-Tropez han paseado desde aristócratas -se dice que más de la mitad de todos los superyates del mundo hacen una parada en la Costa Azul al menos una vez al año-, hasta royals históricos, empezando por la Reina Victoria y terminando por Lady Di, así como muchos de los artistas icónicos del siglo pasado, incluidos Picasso, Cézanne o Yves Klein, el inventor del color azul Klein y original de Niza; y muy especialmente las actrices y bombshells de cada una de las últimas cinco décadas, empezando por la misma Brigitte Bardot.
Este conglomerado de estilo, lujo, arte y cine es lo que hace que la French Riviera no se parezca a ningún otro en el mundo: la moda que se lleva aquí es sólo apta para verano, y hay pocos looks de mar que puedan competir con los bikinis minimalistas, hot pants y vestidos de hilo blanco que se ven a las afueras de los casinos de Montecarlo o en las playas colindantes con la frontera italiana. Sin embargo, y a falta de tópicos, el look Riviera Francesa es mucho más que estilo boho y rayas Breton: a lo largo de las décadas, las modas que se han visto en la Costa Azul han ayudado a definir lo que se llevaría en el look marítimo de todo el mundo, un híbrido entre el chic de la muejr parisienne y el estilo marinero que ha ido cambiando con los años.
Por eso, y aunque no es lo mismo un vestido con falda midi y top halter como el que lució Lauren Bacall en 1953 en unas vacaciones junto a Humphrey Bogart en Cannes, que el vestido de encaje con transparencias y sin zapatos de Michelle Rodríguez en Saint-Tropez el verano pasado, camino a una fiesta en honor a Leonardo Di Caprio, ambos looks tienen un punto de frescura en común que cuesta definir, pero que lleva el mismo aire a sol, salitre y olas de color azul que transpira en todos los estilismos à la Riviera Francesa.
Aalgunas pistas de modas que han pasado por aquí: los tops con pañuelo anudado a modo de banda sobre el pecho y cerrado con un nudo en la espalda. Los hot pants, o pantalones cortos muy cortos, con top a modo de bikini y bolso de paja: se llevaba por las calles de Saint-Tropez en los sesenta, y hoy en día lo copia casi idéntico Kate Moss de vacaciones en la misma ciudad. Los monos de una pieza con rayas Breton (respetando la proporción del 90/ 10 de las prendas de rayas), los petos blancos con crop-top como el de Cara Delevingne a bordo de un yate, y los estampados vivos, especialmente el cuadrito Vichy. Un vestido rojo complementario con el color azul del mar. Unos pantalones cropped en color blanco, perfectos para un airport look a pie de pista en Niza, donde se encuentra el mayor aeropuerto de la zona. O los vestidos slip-on en blanco total, como el de Chiara Ferragni. Todos diferentes, todos con el mismo espíritu playero del sur de Francia.
'GET THE LOOK'
Copiar el estilo de las mujeres que veranean en la Côte d'Azur no es fácil, especialmente si contemplamos, aunque sea hipotéticamente, el presupuesto del que disponen, y mucho menos si nunca hemos pisado la Croisette o subido por las enroscadas cuestas de Mónaco. A pesar de todo, hay algunos básicos que pueden ponernos sobre la pista (sí, has leído bien: básicos. ¿O pensabas que la jet set iba a prescindir de un buen pantalón Capri en pleno mes de agosto?), con los que construir un look veraniego que recuerde a este rincón mediterráneo.
1. Pantalones: cortos, enseñando unas piernas infinitas con zapatos planos de verano como bailarinas, una plataforma sin mucho tacón o unas sandalias de cuero; o cropped al tobillo, como los que ya llevaba Grace Kelly en los años 60, de líneas rectas y de colores claros como un beis neutro, un crema, caqui o sobre todo blanco.
2. Colores y estampados: especialmente en prendas que puedan combinar con esos pantalones Capri en color beis de los que hablábamos antes. Por ejemplo una camiseta de rayas Breton de manga al codo en color marinero, un top de cuadros Vichy o un blusón de gasa ligera.
3. Un little white/ black dress: el primero para el día, con falda corta y cut-outs que recuerde a los vestiditos playeros de los años setenta, y el segundo para la noche, con escote Bardot de hombros caídos o transparencias.
4. Un bikini minimalista: de un color liso, con escote halter, corazón o con anillas en la braguita, o un maillot de cuerpo entero, como los que llevaba Carolina de Mónaco en los ochenta. Acompáñalos de una toalla de rayas si vas a la playa.
5. Un sombrero de paja: de color natural o con una cinta en un tono brillante, y unas sunnies de gran tamaño, al estilo de Sofia Loren. Puedes actualizar este look con un combo de sombrero de ala ancha en una textura diferente con unas gafas de sol de espejo.