Una manera de parecer alta sin 'taconazos' es, obviamente, siendo alta. Esto que parece una verdad de Perogrullo a veces en la práctica no resulta tan obvio como a primera vista: ni las altas muy altas se bajan de los tacones más a menudo que las demás, ni las bajas más bajas desmerecen en centímetros al llevar zapatos planos. Para quienes no han ganado la lotería genética en este terreno -entiendase por lotería el alcanzar la estatura de una top de los años 90-, la geometría, las matemáticas y los efectos ópticos están de nuestro lado: colores, cortes, formas y accesorios añaden centímetros, aunque sea visuales, que evitan tener que andar siempre subidas a unos pumps.
TAYLOR SWIFT Y GIGI HADID: 1,78 m. Taylor es la excepción que confirma la regla en la categoría de chicas altas por naturaleza. Con casi 1,80 de estatura, lo difícil es 'pillarla' bajada de los tacones, y no de cualquier tacón: a la novia de América le van los 'taconazos' que sobrepasan los diez centímetros y la llevan casi al 1,90. Cuando se calza unos zapatos planos, Taylor Swift se resiste a dejar de lado su aire lady y opta casi siempre por un tacón kitty, popularizado hace décadas por Audrey Hepburn (tiene una altura de entre 3 y 4,5 cm.), zapatos con mini-tacón en bloque, o unos mocasines de ante con color. La prenda básica en estos casos es la minifalda triángulo: la 'mini' alarga la pierna y de ahí que la cantante esté con facilidad entre las personas con las piernas más largas del planeta. Su 'rival', al menos en altura, es una de las chicas de su fashion squad, Gigi Hadid, que mide exactamente lo mismo, y que suele optar por el zapato contrario: la zapatilla deportiva, casi siempre un modelo clásico de Adidas ya sea en color oliva o en malva, o de Isabel Marant. Lo que estas zapatillas tienen en común es el corte bajo de la boca, que Gigi refuerza remangando el bajo del pantalón para no 'achatar' la pierna.
Las flats normalmente suelen asociarse a las bailarinas aunque en realidad se aplica a los zapatos con suela plana o tacón muy, muy bajo: Oxfords, babuchas, zapatillas deportivas, náuticos, sling-backs e incluso botas entran en esta categoría. Todos ellos son buenos sustitutos del zapato de tacón alto. La mayoría funcionan con faldas, vaqueros ajustados o vestidos, aunque hay que saber cuál va con cuál para que la ausencia de centímetros no le reste altura a nuestro estilo.
NICOLE RICHIE: 1,55 m. La más bajita de nuestras 'chicas de oro' de hoy es Nicole Richie, que lo que le falta en altura lo suma en estilazo. Nicole sabe sacarle provecho más que nadie a la fórmula low-cut + bajo tobillero, y a veces se permite incluso combinarlo con prendas que normalmente acortarían la figura, como el abrigo de largo a la rodilla.
El truco básico en la gran mayoría de estos casos, puesto en práctica primero y antes que nadie por Coco Chanel al crear el sling-back bicolor hace casi cien años, es el de alargar visualmente la pierna para, en vez de ganar los centímetros que nos da el zapato de tacón, conseguir el efecto contrario: evitar que el zapato plano 'achate' o acorte la figura. Chanel resolvía este problema creando un zapato diseñado en bloques, con la mayor parte del modelo en un tono maquillaje, para alargar la pierna imitando el color de la piel, y la puntera en negro para acortar el pie.
Hoy en día el modelo ha sido copiado hasta la saciedad, y lo que es más, ha evolucionado en una nueva manera de tener piernas infinitas: si quieres que tus piernas parezcan más largas cuando llevas zapatos planos, procura que se vea la mayor parte del pie posible. Es el mismo efecto óptico que con el clásico de Chanel: unas bailarinas con un cuello muy profundo, que se corta prácticamente en la línea de los dedos, o unas babuchas de tiras, cumplen esta regla a rajatabla. Combinadas con faldas y vestidos 'mini', el largo de la pierna se hace interminable, más aún si optas por un modelo en un color neutro, como unas bailarinas en un tono maquillaje o en rosa.
ALEXA CHUNG: 1,73 m. Alexa es la reina de los zapatos planos y se los hemos visto en la calle, en la alfombra roja y probablemente también para andar por casa. Su armario zapatero es prácticamente infinido: náuticos, bailarinas con hebillas, mocasines, tacones kitty... Alexa Chung no se cuenta entre las it-girls más bajitas aunque es frecuente verla haciendo uso de un truco de estilo común para alargar la silueta cuando se baja del zapato de tacón: el look monocolor, en bloque, que viste de pies a cabeza normalmente en un tono oscuro. Por ejemplo, el azul marino.
Si llevas zapato cerrado, fundamentalmente porque es invierno y en diciembre prefieres unos loafers a unas sandalias, los mejores modelos para alargar la pierna son igualmente los que dejan algo de piel al descubierto. Es decir, los diseños low-cut donde la boca está varios centímetros por debajo del tobillo. Con vestidos cortos el efecto es similar al anterior, mientras que con vaqueros, podemos potenciarlo remangando ligeramente el bajo de la pernera del pantalón, o cambiando unos vaqueros rectos o pata de elefante por unos tobilleros. Lo mismo sucede con las botas: un botín bajo cortado a la altura del tobillo alargará la pierna más que una bota alta a la rodilla. Cuanta más piel se vea, mejor.
KATE MOSS: 1,67-1,70 m. Y EMMA STONE: 1,68 m. La estatura de Kate Moss es algo así como el secreto mejor guardado de la élite de las modelos: fue la más bajita de su generación, allá por los 90, una rara avis en aquellos años, cuando lo que se llevaba eran las modelos de piernas interminables à la Naomi Campbell, y que se justificaba por su enorme talento para cautivar a la cámara. Aunque en su agencia de modelos, Storm Models, la clasifican entre las maniquíes que sobrepasan el 1,70 m. de esta estatura, esta cifra se ha puesto en entredicho a menudo, especialmente al comparar a la top con otras modelos en pasarela. No es común ver a Kate bajarse de los tacones, aunque cuando lo hace, suele llevar zapatos planos casi exclusivamente con vaqueros. Lo mismo que Emma Stone, que también se apunta al denim con bajo remangado y abrigo tres cuartos.
Ahora bien, a la hora de parecer más altas, el truco más efectivo no siempre está en el zapato, que al fin y al cabo es lo último que se ve cuando nos encontramos cara a cara con una persona. El color de lo que lleves también cuenta a la hora de ganar centímetros, especialmente cuando no los añades con unos tacones: un look monocolor, por ejemplo en negro, con un little black dress a medio muslo, unos loafers de charol en negro y un abrigo tres cuartos también en negro, crea un efecto óptico que alarga verticalmente la silueta, lo mismo que si eliges un estampado vertical, por ejemplo de rayas.
Un efecto parecido es el que consiguen las prendas de cinturilla alta, ya sea en unos pantalones ajustados, o mejor aún, con una minifalda trapecio o unos shorts: en estos casos, ni la forma del zapato ni la altura del tacón juegan un papel en cómo la silueta se alarga hacia arriba gracias al efecto de elevar visualmente la posición de la cintura y la cadera. Combínalas con un top con escote en pico, y voilá.