El todo o la nada, en esta primavera no parece haber lugar para las medias tintas. Si no nos decantamos por el minimalismo más depurado, hemos de lanzarnos irremediablemente a la tendencia más majestuosa y ornamentada: el nuevo barroco. Frente a la sencillez del “menos es más”, una corriente recargada, abigarrada, rica en matices y materiales nos sorprende con sus combinaciones en la nueva estación. Bordados, apliques, encajes, pedrería y superposiciones se adhieren a nuestras prendas con el objetivo de convertirnos en las reinas del street style durante las veinticuatro horas del día. Y es que lejos de actuar “con nocturnidad y alevosía”, ahora también se disponen a hacernos brillar a plena luz del sol. Es por eso que hoy te damos todas sus claves de estilo para que la primavera te salga, literalmente, bordada.
ÚLTIMA HORA
Anoche se celebraron los premios Oscar y, nosotros, ávidos cazadores de tendencias, descubrimos que, sobre la alfombra roja, el 'baroque chic' también ha conquistado a las 'celebrities'. De esta manera, Rita Ora lució un diseño azul marino con ornamentaciones dorada, de Marchesa. Mucho más recargado fue el modelo de una de las diseñadoras de esta firma, Georgina Chapman (bajo estas líneas).
Como si se tratase del último bastión del mundo barroco, las celebrities se lanzan a esta ornamentada tendencia de una forma ciertamente modesta. En lugar de optar por prendas excesivamente abigarradas, las aplicaciones y la pedrería dibujando formas sobre la tela, así como las siluetas arquitectónicas, se convierten en su mayor apuesta. De ese modo, pudimos ver a Kate Bosworth con un abrigo blanco ornamentado con detalles en pedrería de J. Mendel, o a Lupita Nyong’o y Kristen Stewart confiar en el savoir faire de Karl Lagerfeld para Chanel. Ambas se decantaron por sendos modelos de siluetas curvilíneas e intrincados barroquismos elaborados con apliques en color oro y plata.
Sin embargo, el barroquismo más evocador ha demostrado que puede sobrevivir lejos de las aplicaciones ostentosas y las piedras bordadas. En estos casos, son los materiales más exquisitos, el encaje y los bordados recargados quienes toman la palabra, conjugándose a la perfección en forma de vestidos que se adhieren a la silueta. Fue el caso, por ejemplo, del modelo acuñado por Mary Katrantzou que lució la actriz Diane Kruger. Como si de un auténtico puzzle se tratase, encajes y brocados se superponen y unen para crear una pieza única. Por su parte, Paula Echevarría se decidiría por un vestido bicolor de líneas horizontales y motivos florales bordados, firmado por Alfredo Villalba. Por último, Bianca Brandolini se decantará por un mix de encaje y brocados perteneciente a Dolce & Gabbana.
Por si los vestidos eran poco lienzo en blanco que conquistar, la tendencia más majestuosa encuentra en las faldas su campo de batalla perfecto. Su presencia se hace rotunda en modelos como el que lució Alessandra Ambrosio, una minifalda embellecida con motivos étnicos perteneciente a Emilio Pucci. En el caso de Ana Fernández, será una falda entubada con intrincados apliques en tonos metalizados la que lleve la voz cantante. Tanto la actriz como el ángel de Victoria’s Secret, se decantarán por combinar sus prendas ornamentadas con otras minimalistas que no les resten un ápice de protagonismo, como son una blusa y un blazer negros.
¿Y qué tienen que decir de todo esto las fashion insiders? Las it-girls del momento se adhieren a la corriente de moda más excesiva, haciendo de ella un auténtico imán para los ávidos objetivos de los fotógrafos. Así pudimos ver a Chiara Ferragni con un vestido camisero cubierto de apliques y paillettes de Rochas, a Kristina Bazan apostar por las plumas de un original Marni, o a Elena Perminova presumir de cazadora biker barroca firmada por Fausto Puglisi.
El barroco ‘chic’ triunfa sobre la pasarela
Entre los responsables de que la tendencia más majestuosa se instaure en nuestros vestidores temporada tras temporada se encuentran, irremediablemente, Dolce & Gabbana. En su propuesta primaveral, los diseñadores apostaban por una fusión entre el espíritu mediterráneo con sabor español y la intensa decoración en todas y cada una de sus prendas. De este modo, pudimos ver chaquetas toreras de bordados recargados, pantalones vaqueros invadidos por brillantes o atrevidas minifaldas de cintura alta plagadas de contundentes motivos florales. Sí, desde luego, ellos han sentado las bases del nuevo barroco.
Tampoco se han quedado atrás firmas como Donna Karan, decantándose por conjuntos de falda y chaqueta que sorprendían con sus destellos metalizados. Por otro lado, veríamos cruzar el Boulevard Chanel a la modelo Liu Wen enfundada en un vestido plagado de “escamas” en color acero, que combinaban a la perfección con sugerentes transparencias negras. Con Mary Katrantzou llegará la máxima expresión de esta tendencia, gracias a un extraordinario trabajo artesanal en el que encajes, joyería metálica y decoraciones florales compondrán los vestidos más artísticos y evocadores.
Vaqueros ornamentados, vestidos preciosistas, chaquetas anegadas de apliques… si te has quedado con ganas de más, sumérgete en este shopping dispuesto a hacer de tu armario una auténtica joya de la corona.
1. Vestido de encaje con bordados, de Mango (59,99 €); 2. Minivestido de seda embellecido, de Emilio Pucci (C.P.V.); 3. Vestido con pedrería frontal bordada, de Cuplé (101,50 €); 4. Minivestido embellecido con bordados, de Mary Katrantzou (660 €); 5. Chaqueta bordada, de Zara (69,95 €); 6. Jersey con aplicaciones, de Bimba & Lola (82 €); 7. Vaqueros con apliques, de Paige Denim (270 €); 8. Minifalda con cuentas y borlas, de Matthew Williamson (C.P.V.); 9. Camisa a cuadros con pedrería, de By Malene Birger (155 €).
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