La fama precede a Jeremy Scott, y es que los asistentes a sus desfiles ya saben de antemano que es muy probable que vayan a presenciar uno de los show más excéntricos y originales de la NYFW. Esta vez el rostro más destacado del front row ha sido el de Chiara Ferragni, que ha acudido a descubrir las tendencias que la firma propone de cara a la próxima temporada tras su mediática boda. El diseñador estadounidense entiende la primavera-verano 2019 como una oda a la cultura pop, conseguida a base de looks teñidos de las tonalidades neón que ya han conquistado a las Kardashian, detalles inspirados en el mundo del cómic y divertidos guiños a uno de los videojuegos más icónicos de los últimos años, Pokémon, ya que su protagonista Pikachu ha conquistado varios de los looks presentados sobre la pasarela. Esta explosión de color convive junto a estilismos más apagados, en los que el estampado de cuadros y el de camuflaje adquieren especial protagonismo.