Si hay algo en Cibeles que año tras año llame la atención de este diseñador es la espectacularidad de sus desfiles, protagonizados por sus colecciones de baño y de lencería. Y es que si hay un creador que sepa plasmar como nadie la sofisticación y el glamour de este tipo de prendas es, sin duda alguna, este diseñador catalán que tiene en su hija, Nuria Sardá, una inmejorable colaboradora para la creación de sus llamativos modelos.

En esta ocasión, lo oriental (y más concretamente la India clásica) es el hilo conductor que inspira su nueva colección, en la que se aúnan elegancia, suntuosidad y una paleta cromática verdaderamente prodigiosa. Dorados, malvas, corales y verdes turquesa cubren, ya sea en forma de estampados vegetales, geométricos o en liso, todas sus prendas.

Junto a los bañadores, biquinis y triquinis, André Sardá propone vaporosas túnicas, vestidos y tops, que se complementan a la perfección con cadenas incrustadas de piedras preciosas (jade, ámbar, cristal de roca...), grandes brazaletes, pulseras, collares, cinturones metálicos o altísimos zapatos-joya.

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