David Delfín, que durante mucho tiempo ha sido considerado uno de los enfants terribles de la moda española, ha vuelto a demostrar que la apuesta por lo diferente tiene cada vez más adeptos.

Y su puesta en escena no ha podido ser más directa: bajo los acordes de una banda de música, el diseñador ha presentado una colección, tanto para hombre como para mujer, inspirada, en gran parte, en el estilo militar. Pantalones, vestidos, vestidos por debajo de la rodilla que dejaban ver pantalones de cuero, camisas y chaquetas con trabillas, hombreras, amplias botonaduras, e incluso, cuellos ‘mao’, son las señas de identidad de lo que el diseñador propone para la próxima temporada otoño-invierno.

Eso sí, Bimba Bosé, su modelo fetiche (cuyas evoluciones en la pasarela fueron seguidas con mucha atención por su tío, el cantante Miguel Bosé), también lució algún vestido con cuello halter y amplio vuelo que suavizaba el aspecto marcial de la colección. Pantalones, americanas y cazadoras ceñidas para ellos; y vestidos y faldas con fajines que ciñen la cintura, pichis, abrigos capa y pantalones de aire masculino para ellas componen una colección en la que también se pudo ver el triunfo de colores como el negro, los tonos marrones, caquis o el dorado, con algunos toques de rojo y blanco. La nota original la puso un modelo compuesto, en una pierna, por una pernera de pantalón y, en la otra, una graciosa minifalda rematada con volantes. Un modelo, claro está, que no siempre será del gusto de todos, a excepción, quizás, de los más jóvenes.

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