¿Quién es Valentina Sampaio y por qué debería ser un ángel de Victoria's Secret?

Valentina Sampaio es una joven de apenas 22 años de origen brasileño, mide 1,77 metros de altura, tiene unas medidas que rozan la perfección y comenzó a trabajar en el mundo de la moda en el año 2014 de la mano de la agencia Joy Model. Hasta aquí nada nuevo en el horizonte, sin embargo, si a priori nada la diferenciaría de topscomo Giselle Bündchen, Adriana Lima o Alessandra Ambrosio, lo cierto es que a Sampaio hay algo que la hace todavía más especial: es la primera modelo transgénero en protagonizar la portada de esta publicación, así como en participar en las campañas de la reconocida marca francesa de cosméticos L'Oreal, desde el año 2015.

“Siempre fui una chica y siempre fui tratada como tal. Es así como me siento y eso es lo que transmito a las personas”, declaró Sampaio al diario Folha de São Paulo. Y es que, a pesar de su juventud, la modelo brasileña lucha de forma incesante por romper con todos los prejuicios que rodean al mundo de la moda tras haber sufrido situaciones discriminatorias que a día de hoy prefiere olvidar. La top procedente del estado de Ceará, se posiciona de forma contundente dentro de la industria, siendo todo un referente en su país y protagonizando las portadas de las cabeceras brasileñas más importantes. Además, puede presumir de ser una de las musas de la São Paulo Fashion Week, trabajando junto a firmas como Água de Coco, Patrícia Vieira, Fernanda Yamamoto o Helo Rocha.

Con más de 89.000 seguidores en su cuenta de Instagram y tras erigirse una de las imágenes de belleza de L’Oréal, el nombre de Valentina ha sonado con fuerza de cara a subirse a las pasarelas de Victoria’s Secret, uno de los sueños por cumplir de la joven brasileña. Lo cierto, es que este hecho supondría todo un hito histórico dentro de la mediática firma lencera, ya que ninguna modelo trans lo ha conseguido anteriormente, ni siquiera Andreja Pejic o Hari Nef. De esta forma, se daría un paso más a la hora de celebrar la belleza transexual, combatir las situaciones de rechazo y reivindicar un mundo más allá de las apariencias y del género, deconstruyendo prejuicios y evolucionando en materia de derechos humanos.