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A principios del pasado mes de diciembre, Natasha Poly (33) desvelaba una feliz noticia en su perfil de Instagram: estaba esperando un bebé. Por lo tanto, segundo embarazo para la supermodelo rusa que lo anunciaba publicando una tierna imagen en la que aparecía junto a su hija Aleksandra Christina Bakker (5), con quien ha posado en más de una ocasión sobre la alfombra roja. Esta, cuidadosamente, besaba su ya evidente silueta premamá. Sin embargo, faltaba por conocer si su primogénita tendría un hermanito o hermanita. Un misterio que ha quedado resuelto en la misma red social que nos anunció su nuevo estado y tras publicar imágenes de la baby shower que por sorpresa le habían organizado sus amigos más cercanos, entre los que se encontraba la también modelo Eugenia Volodina. Ahora, la nueva incógnita es saber cuál es el nombre.
"¡Fue un sorpresa increíble, la baby shower más dulce de la historia! Cuando tienes amigos que son como tú y planean y organizan la fiesta más increíble, entonces te sientes agradecida... Soy afortunada de tenerlos, personas que son verdaderamente mágicas. ¡Lo más bonito! ¡Muchas gracias Maria Helena Baly por organizarlo! ¡Gracias por la sorpresa! ¡Gracias a todos por estar juntos! Me siento muy querida", anunciaba la modelo como acompañamiento a un álbum fotográfico en el que recopilaba imágenes del evento.
Unas instantáneas que, junto a otro recopilatorio de imágenes publicado poco después, desvelaban una decoración cuyo color daba las primeras pistas sobre el sexo del bebé, al menos al uso tradicional. Sin embargo, y para zanjar cualquier duda, Natasha Poly también usó un hashtag decisivo: "#ItsABoy (Es un niño)".
Y si la felicidad queda patente en estas fotografías y mensajes, nada que ver con su última publicación, colofón a este emotivo momento. En otro álbum de imágenes, Natasha recreó la imagen con la anunció su embarazo y, de nuevo, posó junto a Aleksandra, que besaba su tripita. Y es que su primogénita tuvo un papel muy relevante en este día, ya que fue gancho para que la modelo no supiera qué iba a pasar y acudiera a la sorpresa en el momento y lugar exactos.
Como la pequeña, su padre, Peter Bakker, también era complice para 'engañar' a la modelo. El empresario holandés y Natasha se casarón el 16 de abril de 2011 en Saint Tropez y en medio de unos festejos que se prolongaron durante tres días.
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