Puede que colgara las alas como ángel de Victoria's Secret y anunciara su retirada definitiva de las pasarelas el pasado invierno, pero Alessandra Ambrosio no ha tenido tiempo de aburrirse estos meses, ya que tanto su agenda profesional como la personal han estado repletas. La modelo carioca está teniendo un agitado verano en el que ha encontrado tiempo para vivir el mundial de fútbol desde Rusia, tomar el sol en las playas de Ibiza, volar a Madrid para acudir al Mad Cool Festival junto a sus amigas, disfrutar de las vacaciones de sus dos hijos Anja (que la semana que viene cumplirá 10 años) y Noah (que tiene 6) y continuar trabajando en destinos tan diversos como París o Nueva Jersey.
Hasta este estado de la Costa Oeste, concretamente a la ciudad de Atlantic City, que debe su fama a los grandes casinos que acoge, le ha llevado su último proyecto a la top. Alessandra ha acudido como invitada VIP al HQ², un exclusivo club que pertenece al hotel The Ocean AC, del que curiosamente es dueño Oliver Ripley, un joven empresario pareja de su compañera de profesión -y ahora también actriz- Sara Sampaio. La brasileña ha ejercido de anfitriona en una divertida fiesta en la piscina, donde ha vuelto a hacer gala de su desparpajo y su pasión por la música y el baile, llegando incluso a ejercer de DJ en momentos puntuales.
En esta ocasión, Alessandra ha querido lucir un estilismo en blanco para resaltar el bronceado que ha adquirido durante sus vacaciones, y ha buscado la inspiración para el mismo en la Antigua Grecia. El vestido níveo de un solo hombro que ha llevado se ceñía a sus impresionantes curvas gracias al juego de drapeados que recordaba a la indumentaria de las estatuas clásicas, y no es casualidad, ya que este modelo se denomina Diana. Norma Kamali, diseñadora que lo firma y que ha vestido recientemente a otras celebrities como Jennifer Lopez o Kourtney Kardashian, ha querido rendir homenaje con esta creación a la diosa griega de la caza, protectora de la naturaleza y la Luna, pero ha recurrido a materiales como el nylon y la lycra para conseguir un efecto más sensual que abrace el cuerpo de su portadora.
La modelo ha completado el look con sandalias de metacrilato -que mostraban una perfecta pedicura en tonos blancos- y joyas doradas entre las que destacaban unos grandes pendientes en forma de aro. El punto disco lo ha aportado el beauty look, ya que Alessandra ha rizado su melena castaña con el objetivo de conseguir un volumen extra, para lo que ha texturizado especialmente la raíz. En cuanto al maquillaje, ha apostado de nuevo por los tonos tierra, que sabe que le favorecen especialmente.