Una avalancha de fotógrafos se agolpó en torno a la modelo Kate Moss cuando, ajena a los controvertidos momentos que vive –recordemos que todavía siguen pesando sobre ella las imágenes en las que se la mostraba consumiendo cocaína-, aparecía entre el público asistente al desfile de Burberry Prorsum, dentro de la Semana de la Moda de Milán otoño-invierno 2006-2007. De hecho, la top model británica es uno de los rostros de esta firma que, cuando salieron a la luz sus coqueteos con las drogas, decidió despedirla, aunque, poco después, rectificaron tal decisión.

En Milán, Kate estaba radiante y eso que apenas llevaba maquillaje y su look era sobrio, con chaqueta acolchada negra y falda tubo por la rodilla a juego. Allí coincidió, entre otros, con su amigo el fotógrafo Mario Testino. Parece que ha llegado la calma a su particular ‘tempestad’.

La marca de Burberry
En cuanto a la colección de Burberry Prorsum para el otoño-invierno de 2006-2007, Christopher Bailey, diseñador de la firma, propone una moda “inspirada en los Duques de Windsor”, tal y como él comentó. Como en cada temporada, no faltó en su pasarela el clásico trench, sello indiscutible de esta marca. No obstante, en esta ocasión, se presenta acolchado, con estampado de cuadros, con cinturones de piel marrón a juego con los botones, y en contraste con el algodón beis utilizado para confeccionar el resto de la prenda; o, lo más llamativo, se ribetea con piel, incluso en una ocasión confecciona con este material todo el modelo desde la cintura hasta el bajo.
En su colección, también se incluyen cazadoras de piel muy entalladas, jerséis y camisas con jaretas y, lo más predominante, faldas con volantes en diagonal, que crean volúmenes en contraste con cuerpos muy ceñidos.

 Noticias relacionadas

Secciones