Para la ocasión, Chloë hacía un guiño a su suegra y no dudaba enfundarse un abrigo extra-largo firmado por Victoria Beckham —ya se sabe, hay que entrar con buen pie en la familia—, combinado con un suéter negro y unos pantalones denim en color gris. Como accesorios, se decantaba por unos botines de ante en la misma tonalidad del suéter. Realmente llama la atención que, frente a las capas de ropa de la intérprete, Brooklyn saliese a brazo descubierto, pero una de dos: o soporta mejor las bajas temperaturas o todo era cuestión de mostrar su camiseta Kent & Curwen, firma con la que colabora su padre David Beckham. El resto de su outfit lo componían unos pantalones grises con dobladillo en el bajo, sus inseparables zapatillas Vans, una gorra al más puro estilo baker boy y un cinturón de piel.