Coco Chanel —a quien además de diseños visionarios debemos un gran número de citas célebres para el recuerdo— tenía claro que, a la hora de vestir, las tendencias jamás podrían desbancar al estilo y que la apariencia de una mujer nunca sería comparable con su esencia. Teniendo claro qué tipo vestido de fiesta se identifica más con nuestra personalidad y dejando atrás los embistes de las modas efímeras, existen una serie de tonalidades minimalistas y atemporales, aunque altamente poderosas, que ganan la partida a tendencias pasajeras y cambios de estación. Es el caso de clásicos como el negro, el azul marino y un nuevo aliado puramente effortless, el nude.
Marfil, crema, topo, tofe… sin duda, es imposible no sucumbir a la luminosidad y a la naturalidad que emanan estos colores en forma de vestidos, ya sea jugando en solitario, combinados entre sí o dejándose desdibujar por algún estampado. Su sutileza cromática les ha valido el título de “protagonistas silenciosos”, siendo los partenaires perfectos si lo que buscas con tu look de fiesta es una elegancia serena y sin estridencias. La combinación de texturas y tejidos, bordados y apliques se ha convertido en la apuesta estrella de las firmas especializadas, que lo han incluido sin mesura en sus nuevas colecciones.
¿Quieres captar todas las miradas con toda una oda a la naturalidad? Descubre 15 vestidos de fiesta con los que te será increíblemente sencillo convertirte en la invitada perfecta.
© Cherubina
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