Sí, el blanco está hecho para el invierno. Esta tonalidad no está reservada a las nupcias ni únicamente a los días de verano en los que podemos presumir de bronceado. Si es precisamente el color que tiñe la nieve, ¿por qué no vamos a abrirle las puertas del armario invernal? Sobre todo si es en forma de total looks como el que luce la intérprete, una elección en clave minimalista tan versátil y funcional como el propio total black. Por otra parte, Ariel hace honor a una de esas reglas estéticas no escritas que siguen muchas mujeres a la hora de vestirse. Y es que, lejos de lucir los escotes de vértigo a los que nos tiene acostumbrados, optó por combinar su minifalda con una camiseta básica de algodón y cuello redondo. En resumen: Descubierto por debajo, cubierto por arriba —y viceversa—.