Japón
Para la ceremonia de entronización del emperador Naruhito junto a la emperatriz Masako, la Reina llevó un llamativo vestido floral de Matilde Cano. Lo acompañó de clutch en tono rosa palo, modelo Victoria Insignia de CH Carolina Herrera. Acorde con el protocolo, la Reina optó por llevar un tocado, un accesorio poco habitual en ella. Concretamente, se decantó por una diadema confeccionada artesanalmente en rafia y terciopelo rosa empolvado de la firma sevillana Nana Golmar. También incorporó la banda de la orden japonesa de la Preciosa Corona, un obsequio que recibió durante su Visita de Estado a Japón en la primavera de 2017. Como culminación de su subilme look, doña Letizia recuperó piezas del joyero real. Por primera vez, la Reina ha llevado uno de los denominados collares de chatones, que tiene su origen el regalo de bodas que Alfonso XIII le entregó a su esposa la reina Victoria Eugenia. Sin embargo, también quiso acompañar esta novedad de otras joyas. Como pendientes, se ha decantado por unas piezas de diamantes y esmeraldas, que pertenecen a la reina emérita Sofía y que no es la primera vez que lleva. No falta tampoco su anillo artesanal de Karen Hallam y sorprende con una pulsera de diamantes a juego.