Como joyas, destacó sobre su cabeza la tiara Eduardiana, que estrenó en 2016. Se trata de una joya elaborada en oro y plata de 14 quilates con pequeños rubíes redondos, diamantes y espinelas. A juego, sus pendientes. Estas piezas fueron adquiridas por la princesa Mary a través de la casa de subastas Bruun Rasmuseen años atrás y, se comenta, que el conjunto al completo se vendió por unos 4.000 euros. Además, llevó el collar de la Orden del Elefante, siendo esta uno de los contados acontecimientos en los que usa esta creación.