Del 16 al 31 de octubre, los duques de Sussex estuvieron de visita oficial por Australia, Fiji, el Reino de Tonga y Nueva Zelanda. Un tour en el que Meghan Markle debutó con looks premamá tras el anuncio de que está embarazada de su primer hijo. Una ocasión en la que, además, no ha perdido la oportunidad de homenajear a la madre de su marido, el príncipe Harry, en estos significativos estilismos al incorporar piezas de joyería que le pertenecieron.
En la imagen, en su último acto del viaje (Redwoods Treewalk,en Rotorua). Allí Meghan Markle llevó abrigo acolchado del príncipe Harry, de Norrona (439 euros); vaqueros pitillo y bailarinas, de Birdies (123 euros).